La boda de Javier y Rosa en Salamanca, Salamanca
Modernas Verano Morado 2 profesionales
J&R
01 Sep, 2012El día de nuestra boda
El día comenzó temprano, teníamos que estar en la peluquería a las 07.00. La verdad es que aunque era muy pronto estaba bastante descansada, los niños se habían portado y nos habían dejado dormir del tirón.Llegamos a la peluquería con retraso (mi futuro señor marido tardó una hora en afeitarse...), hacía bastante frío (solo 7ºC) y mi ojo derecho empezó a llorar por el camino (malo). Nos atendieron de inmediato y de momento todo muy bien, nada de nervios. Fueron super rápidos y para las 10.00 ya estábamos saliendo de la peluquería. Mi ojo no dejó de llorar en todo momento, ni mientras me maquillaban ni después. La mañana se presentaba fresquita aunque ya empezaba a brillar y calentar el sol. Nos dio tiempo incluso de ir a una mercería a comprarle una diadema para mi niña, para que las dos peques fueran iguales. Llegamos al hotel y subimos a la habitación, al poco nos avisaron de que ya estaba allí el fotógrafo. Él se puso a sacar fotos de los detalles mientras yo terminaba de asearme. Ya llegó mi padre con mi niña y al poco apareció el del vídeo y ya empezó todo. Sesión de fotos y vídeo mientras me vestía. ¡Mi madre estaba bastante más nerviosa que yo! Por fin iba a ver a su niña casada, la pobre ya tenía asumido que eso no iba a suceder, pero bueno, nunca se puede perder la esperanza.Estuvimos haciendo tiempo para que apareciese mi suegro con mi hijo y al final nos decidimos a bajar para encontrárnoslos abajo, ¡al hombre no se le había ocurrido avisar que ya estaban allí!Llegamos a la iglesia y todos allí esperando, y mi maridín todo guapo. Conseguimos meter a todos para dentro e hicimos nuestro paseíllo con la canción de Il Divo, "Hasta el final". ¡Cómo me gusta esa canción! Nuestro gran amigo, el padre Lorenzo, hizo que todo el mundo se callase y prestase atención a la letra. La ceremonia espectacular, Lorenzo la bordó, nos hizo reír, nos contó un par de historias/poesías. Javier hizo un discurso de agradecimiento y nuestros peques participaron de la entrega de anillos y arras. Aunque fue larga a nadie se le hizo pesada. Y todos estuvieron de acuerdo en que había sido la mejor ceremonia de una boda a la que habían asistido y entendieron el porqué de trasladarnos hasta Salamanca para que Lorenzo nos pudiera casar. La sesión de fotos fue super amena y divertida. Ya íbamos mal de tiempo (como no) y tuvimos que hacerla rápido. Al llegar al hotel un fotógrafo de la Gaceta nos sacó una foto, ¡así que salimos en el periódico y todo! Otro recuerdo bonito. El cóctel debió ser espectacular, y digo debió porque nosotros no lo catamos. El jamón voló, el cortador no daba abasto, debía de tener cola y todo...La comida un diez. Los camareros muy bien, el hotel perfecto. Aunque empezamos tarde en ningún momento nos metieron prisa ni nada. Todo se me pasó volando y se nos olvidaron un par de cosas que teníamos preparadas, como por ejemplo darle el ramo de novia a mi madre. Nos dimos cuenta ya comenzado el baile y allí en medio paramos el baile y se lo entregé junto con otro ramo de rosas precioso para la madre de Javier. Para el primer baile había hecho un remix pero no habíamos tenido tiempo de preparlo, ni ensayar ni nada y Javier no estaba nada convencido de empezar con él porque decía que no quería hacer el ridículo. Al final, en el momento de empezar el baile se dejó convencer y lo hicimos. Las primeras notas sonaron y me agarró ¡y sin avisar me da una vuelta! Yo no me lo esperaba ¡y al suelo que me fui! ¡Qué risa! Los comentarios: "ya la mataste" y cosas por el estilo. Los niños se animaron a bailar con nosotros así que adiós vergüenza. El segundo baile fue especial para mi padre, "El vals de las mariposas". Ahí mi papito se me emocionó, ¡ains! y luego vinieron 3 horas que se me pasaron en un tris. Durante el baile hubo photocall y barra libre y os puedo decir que siempre había alguien bailando, sacándose una foto o pidiendo una copa. Los comentarios de todo el mundo fueron unánimes: una boda 10, con muchísimos detalles, una ceremonia preciosa, comida espectacular y muy divertida. Nosotros disfrutamos de la boda que queríamos y nos lo pasamos genial. Sin duda volvería a casarme otra vez por poder revivir ese gran día. Como todas decimos nos faltaron momentos para poder dedicarlos con más detenimiento a los invitados, haber podido disfrutar del cóctel con ellos y cosas así pero en general no cambiaría nada.
Servicios y Profesionales de la Boda de Javier y Rosa
Otras bodas en Abba Fonseca Hotel
Ver todas
Otras bodas en Salamanca
Ver todas
Casa Imperial Salamanca
Villas de Pomar
Hotel Hospes Palacio de San Esteban
Inspírate con estas bodas
2 comentarios
Deja tu comentario