La boda de Javi y Jessica en Olivella, Barcelona
Rústicas Verano Beige 5 profesionales
J&J
29 Jul, 2017El día de nuestra boda
Fue mejor de lo que me hubiese imaginado. Siempre había querido tener una boda diferente, algo en lo que nos reflejase como somos nosotros. Campestre, sencilla,... como lo que somos.
Teníamos claro desde el primer momento cómo queríamos que fuese nuestro día. Y buscamos y en la primera búsqueda encontramos una maravillosa y fantástica masía en la cual no dudamos en pedir cita para ir a visitarla (Masía Pou de la Vinya).
Cuando llegó el día de verla y estuvimos allí, no dudamos ni un solo momento en que sería la elegida para realizar allí nuestro gran día. Juan e Iryna son encantadores, familiares, grandísimas personas y nos enamoraron nada más verlos. ¡Son geniales! Y tampoco nos olvidamos de Verónica y Roman, que son los weddings. ¡Fantásticos también!
¡Llegó el gran día! La ceremonia y el banquete lo organizamos en el mismo lugar y decidimos que fuese de tarde, así que empezó a las 19:45, ya que un 29 de julio con ese sol al atardecer, con esos tonos naranjas era lo que siempre había deseado.
Seguir leyendo »Me levanté a las 9 de la mañana. Yo había dormido en casa de mis padres, ya que también venía familia de fuera y nos lo pasamos en grande la noche de antes. Javi se fue a dormir a casa de su mamá y así sería todo más emocionante.
A eso de las 11 me fui a buscar mi ramo, los dos que regalé y los ramilletes y mi sorpresa vino cuando llegué... ¡No estaban preparados! Y yo me tenía que ir a la masía a las 12:30.
Bueno, no me puse nerviosa, ya que el chico de la floristería estaba bastante nervioso porque se había quedado solo y ese mismo día tenía más bodas. Tardó una hora y media en hacerme todo... menos mal que no se demoró mucho. Así que una vez listo todo, cogí mi vestido y todas las cosas y me dirigí a la masía. Cuando llegué y vi algunas de las cosas preparadas me emocioné muchísimo porque estaba quedando todo súper bonito.
¡Entramos las cosas que, por cierto, el vestido de novia que llevé es el mismo que llevo mi madre el día que se casó que, por cierto, se casó el mismo día que nos casamos nosotros! ¡Siempre había querido casarme con el vestido de novia de mi madre y como estaba igual de delgadita que yo, pues me iba clavado! Lo único que hicimos un cambio, pusimos encaje encima para que no se viese tan sencillo, en la parte de la falda, y quedó precioso.
Cuando me estaban maquillando y peinando ya empecé a ponerme un poco nerviosa, ya que comenzaron a ir llegando invitados porque algunos se quedaban a dormir en el mismo recinto de la masía y yo desde la ventana de mi habitación los veía llegar y los escuchaba y ya comenzaba a ponerme un poco nerviosa.
A mí no me dejaron salir de la habitación hasta que no fue el momento de mi salida. La ceremonia era sorpresa y yo no sabía nada de nada... Toda una aventura, sí, lo sé, pero confiaba plenamente en la que me lo organizaría que era mi suegra. Y pensaréis.... ¿Pero cómo le dejas a tu suegra que organice algo tan importante para los novios? ¡Pues sí! ¡La dejé! Sabía perfectamente que sería un día inolvidable, y conociéndola, ¡sabía que iba a ser la mejor ceremonia que podría tener! Todo de guirnaldas, asientos de balas de paja... ¡Me encantó!
Una vez lista, me comenzaron a grabar, a realizarme las fotos y cuando terminaron me acerqué con mi padre a la ventana para ver la primera sorpresa de la ceremonia... ¡Mi hermano era el que oficiaría la ceremonia! ¡Me quedé muerta! Me encantó y no paraba de reír y reír. Siempre estoy riendo, pero de los nervios me da más aún por reír.
¡Segunda sorpresa! Comenzó a sonar la música de Rocky... y ¡tachán! ¡Salieron los compañeros de trabajo de mi ahora marido vestidos de gala! ¡Me encantó! Yo estaba flipando desde la ventana viendo a todo el mundo tan contento, alucinando y aplaudiendo. Fue superchulo.
¡Tercera sorpresa! Mis dos mejores amigas y los mejores amigos de mi marido iban delante del novio vestidos y vestidas iguales y cuando llegaron al pasillo de la ceremonia entraron bailando. ¡Fue superchulo! Y por fin salió el novio.... ¡Guapísimo! Son su mamá a un lado y su hermana al otro. Fue muy emocionante.
Y llegó mi momento. Comenzó a sonar la canción: Welcome Home, Son - Radical Face y, como no iba a ser menos, mis dos sobrinos pequeños salieron antes que yo, cada uno con un cartel que les hice yo que en los que ponía:
''Tito, ¿estás listo?'' y ''Ya viene la novia''. Fue un momento muy tierno, verlos tan pequeñitos llevando esos carteles. Y salió mi padre primero, me esperó en la puerta y seguidamente que salí yo. Me cogí del brazo y nos dirigimos hacia donde estaba la ceremonia. En el pasillo me estaban esperando los chicos vestidos de gala, tres en cada lado, formados,... ¡Me encantó!
He de decir que cuando llegué al principio del pasillo y vi a todo el mundo aplaudiendo me dio mucha vergüenza pasar, era el centro de atención y nunca me ha gustado serlo, pero ese día era inevitable. ¡Todas las miradas se centran en la novia! Llegué arriba y mi padre me entregó a mi chico.
Comenzó la ceremonia y al llevar 10 minutos, de repente comenzó a sonar: Me quedo contigo de los chunguitos. Y de repente se levantó Javi y comenzó a cantarme, eso sí, en playback. Me estaba riendo mucho, la gente se quedó alucinando y yo más todavía porque lo único que me salía era reírme. ¡Fue super original y bonito!
Después nos leyó mi madre y mi cuñada, que tampoco sabía que lo harían, y la verdad es que fue superbonito, las palabras que nos dijeron siempre las tendremos en nuestros corazones. Después comenzó a sonar una melodía que elegí para dar mis votos a mi futuro marido; River Flows in You - Jonas Kvarnström. ¡Preciosa!
Comencé a leer muy bien, pero cuando estaba llegando al final me emocioné tanto que no era capaz de seguir leyendo. Entre la vergüenza que me daba leer delante de toda la gente, la emoción que tenía y todo, me fue imposible, pero después de respirar durante unos segundos, me tranquilicé y el ánimo de la gente diciéndome: "¡Vamos, Jéssica, tú puedes!" pude terminar de leerlo.
Después llegó el momento de las alianzas. ¡Increíble! En ese momento me sentí tan feliz... ¡Ya era una mujer casada y con la mejor persona del mundo (no me acuerdo que canción sonó en ese momento). Entre aplausos nos besamos y comenzó a sonar Halo de Beyoncé. Aún cuando la escucho se me ponen los pelos de punta.
En el pasillo nos estaban esperando los chicos de gala, unos a un lado y otros al otro. Con las espadas levantadas comenzamos a pasar y cuando llegamos al final, ¡nuestra sorpresa es que nos cierran el pasillo con las espadas! En ese momento se apaga la música y uno de ellos dice gritando en voz alta: "¡Javier! Si por aquí quieres pasar, a la novia tienes que besar". Entre risas nos dimos un beso y levantaron las espadas para que pudiésemos pasar. Comenzó a sonar la música y seguimos pasillo adelante, entre burbujas, aplausos y pétalos de flores, pasamos el pasillo. ¡Increíble momento!
En ese momento ya comenzamos a saludarnos con los invitados, fueron subiendo a donde se haría el cóctel y nosotros nos fuimos hacernos fotos por los alrededores de la masía.
Cuando llegó el momento de entrar en el sitio donde se haría la cena, nosotros decimos salir con la canción de My Girl - Radio Edit. Nos inventamos un baile en ese mismo momento, que nos quedó genial, y fuimos bailando hacia donde estaba nuestra mesa nupcial. Todo fue al aire libre, así que con la noche, las estrellas,... ¡Quedó superchulo!
Comenzó la cena. Nosotros queríamos algo diferente, así que hablamos con nuestro catering, 'Catering la Lloca’, que por ciertos son fantásticos y geniales, sobre todo Rubén, que está en todo y es genial. Y decidimos hacer una especie de barbacoa, que consistía en que cada mesa tenía su propia barbacoa, en la que se podía ir haciendo la carne a su gusto. Los invitados quedaron encantados porque... ¿a quién no le gusta una buena barbacoa?
Después vinieron los regalos, el primero para mi mamá, en el cual le entregaría mi ramo de novia, ya que ese día era su aniversario de bodas. Se quedó alucinada porque no se lo esperaba para nada. La canción que elegí para entregarle el ramo fue: Gloria a ti - Rosario. ¡Preciosa!
Los siguientes regalos fueron para mis dos cuñadas, a las cuales les regalé dos ramos un poco más pequeños, pero igual que el mío de novia. Fliparon porque no se lo esperaban. Las canciones que escogí para ellas fueron: Magalenha - Sergio Mendes (ya que una de ellas es brasileña y esa canción la escuchábamos cuando vivíamos juntas) y la otra fue 7 years - Lukas Graham. La escogí porque es una de las canciones favoritas de ella y sabía que esta canción le encantaba. ¡Se emocionó muchísimo!
Una vez repartidos los regalos, llegó la hora de regalar los novios. Esto era una de las cosas que yo tenía clara que no quería hacerla como todo el mundo lo suele hacer, por lo que decidimos hacer un juego para entregarlos (que los novios los hice yo. Bueno, compré el típico cuadro con fondo de IKEA, y dentro puse los novios de playmóbil con algunos adornos que agregué). Y para los que participaron, diseñé unas plantillas en el Word, que las imprimí y las puse en cuadros para que quedasen más bonitas, en las que ponía: ''Bodorrio a la vista, ¿para cuándo?'', ''¡Pídeselo! ¡Pídeselo!, tenemos ganas de juerga'', ''¡Sois los siguientes! De una boda sale otra boda''. ¡Quedaron superchulas!
Pues para regalarlos lo que hicimos fue hacer bailar a las parejas, la canción que se baila en la película de The Pulp Fiction. Era un inconveniente para las parejas, pero queríamos que pasaran un poquito de vergüenza y que se lo ganasen.
Una vez terminó esto, llegó el momento de sacar la tarta. Para ello nosotros escogimos la canción de Kaleo - Way Down We Go. Salió la tarta superbonita y la cortamos con una de las espadas que llevaban los chicos en la ceremonia. Un momento muy bonito.
Y después de los cafés, etc. llegó el momento del primer baile de los novios. Nosotros queríamos que fuese algo diferente, así que nos prepararon un baile que fue un poco de lentillo y después terminamos con una salsa. La gente se quedó sorprendía, nos quedó superchulo, ya que mí me gusta bailar y se me da más o menos bien, pero a mi marido lo de bailar no se le da muy bien, pero con la práctica nos quedó muy chulo. Las canciones que escogimos fueron Thinking Out Loud - Ed Sheeran seguida de Somos tu y yo - Gente de Zona.
Una vez terminamos el baile ya comenzó la discoteca y otra de las sorpresas que mi hermano nos regaló lo del fotomatón, la cual cosa recomiendo porque es superdivertido y las fotos que salen de ahí son un recuerdo graciosísimo. Además, también se pueden grabar vídeos y sale de todo de ahí. Es superdivertido, lo recomiendo 100%.
Para mí, uno de los mejores días de mi vida que, sin duda, repetiría una y mil veces. Y bueno, surgieron imprevistos, pero siempre que se organizan eventos, suelen surgir. Así que futuras novias, no os asustéis y estad tranquilas, que ese día es una pasada. Los pasaréis genial. Y no estéis nerviosas y disfrutad, que se pasa volando.
Gracias por haber dedicado unos minutillos a leer mi historia. Un beso y que viva el amor.
Servicios y Profesionales de la Boda de Javi y Jessica
Otras bodas en Masia Pou de la Vinya
Ver todas
Otras bodas en Barcelona
Ver todas
Inspírate con estas bodas
Deja tu comentario