La boda de Iñigo y Maialen en Atxondo, Vizcaya

El día de nuestra boda

¿Qué puedo decir de ese gran día? Supongo que lo que las demás parejas. Fue el día más increíble de mi vida. Todo empezó el día antes, puesto que tuvimos la posibilidad de juntarnos en una casa rural con nuestros familiares y amigo más allegados para disfrutar de las últimas horas de solteros. Al día siguiente nos levantamos pronto, y desayunamos todos juntos mientras disfrutábamos de unas vistas espectaculares e intercambiamos los últimos nervios. Tras llenar el estómago, nos pusimos manos a la obra con los retoques. A las 12:30 empezó la ceremonia en una pequeña ermita en Axpe, y después de una misa muy bonita nos fuimos a hacer la sesión de fotos mientras que los invitados disfrutaban de unos pinchos y unos tragos bajo los rayos tibios del sol. Después de las fotos nos juntamos con todos en el restaurante y empezó la fiesta. ¿Lo mejor de todo? El ambiente que hubo. Conocidos y desconocidos lo dieron todo en la pista de baile. Fue simplemente un día increíble que nunca olvidaré.