La boda de Farouk y Claudia en Canet De Mar, Barcelona

La ducha me da tiempo a recordar mis preocupaciones… La lluvia (toda la ceremonia está pensada para exterior y es esencial que sea así para que el interior sea sorpresa hasta la hora de la cena), cómo había llovido el día anterior, no sabía cómo iba a ser ese día, llegar a tiempo (me engañaba si pensaba que iba a ser posible), mi vestido, capa, medias, zapatos (lo tenía todo mi modista y me lo tenía que llevar ella)… Sentía que había dejado muchas cosas al aire pero que no podía arreglarlo ahora, lo que tenía que hacer era meter prisa como fuera para que mis hermanas y yo saliéramos de esa casa lo antes posible.

Lo conseguí, aunque obviamente, no a tiempo… La estilista llegó antes, dejé las cosas con la wedding planner, le dije cómo lo quería, y mi hermana menor empezó a arreglarse.

La mayor y yo jugamos un poquito con mi sobrinita, y luego se arregló ella y luego yo. Era un poco raro, no sentía que fuera el día, pero la gente estaba allí, mi familia, empezaban a llegar mis amigos, mi gente… Sin embargo y por suerte, mis nervios nunca llegaron.

Hubo pequeños contratiempos, el collar que iba a llegar se enredó y no hubo manera de desenredarlo, así que no pude llevarlo, llegamos tarde así que todo se retrasó… Pero aparte de eso, no me imaginaba el día precioso que tenía por delante.

Una vez peinada y maquillada, me fui a la habitación a arreglarme. Me dejaron la habitación del rey, que es una habitación preciosa en la que te sientes princesa de cuento de hadas.

Me vestí, me hicieron fotos, y una vez preparada, llegó mi hermano, el padrino, con el escrito que había preparado para mí, como tradición catalana, y el ramo que yo quería.

Lo leyeron él, mi hermano mayor y mi hermano menor, fue un momento muy emotivo que siempre recordaré.

Ya estaba lista… La gente me preguntaba si estaba nerviosa, ¡y la verdad es que no lo estaba! No me entendía a mí misma, pero creo que gracias a eso, lo disfruté todo muchísimo más.

Salieron primero mis hermanas, las damas de honor, acompañadas de mis hermanos, sobrinos o sus novios.

Después salimos mi padre y yo… Yo iba contentísima, no podía esconder la sonrisa enorme dibujada en mi cara. Bajando las escaleras, se me enganchó el vestido… Fue mi gracioso y un toque cómico, pero no me puso nerviosa, al contrario, me reí, y luego agradecí que los maravillosos fotógrafos omitieran esa parte en el vídeo de la boda.

Al llegar, vi a mi Farouk esperándome también con una sonrisa enorme, y simplemente fui feliz al abrazarle y por fin sentarme junto a él.

En la ceremonia, disfruté mucho de las palabras del actor, ya que lo hizo todo humorístico y a la vez romántico… No pensé que haría mención a la hora y media de retraso que les hice esperar…

Pero también disfruté de los graciosos votos de Farouk, y del regalo sorpresa que le quise hacer, cantarle una canción delante de todos. Morí de vergüenza, pero si cantáis bien, hacedlo, creedme, vale la pena. En mi caso pude arrancarle lágrimas a mi Farouk, que no se lo esperaba para nada.

La banda sonora de mi boda fue impresionante gracias a la banda que habíamos contratado, y no podría haber escogido una mejor.

Intercambiamos alianzas, sellamos nuestra unión con un beso y pasamos por debajo de una lluvia de mariposas de papel, un detalle precioso idea de mi wedding planner.

Nos hicimos fotos bailando, en diferentes partes del castillo… Yo estaba feliz, pensaba en el tiempo que habíamos estado juntos, en lo difícil que había sido por mi trabajo (azafata de vuelo), en el tiempo que habíamos invertido en la preparación de la boda y en lo que todo había valido la pena. Todo, el lugar era de cuento, la gente disfrutando, la música, las luces… Una vez terminadas las fotos, comimos un poco del delicioso aperitivo preparado por el catering. Riquísimo, y después, bailamos al son de la música del dj (rock de los 50, el cual disfrutamos muchísimo) y nos hicimos fotos con el photocall de Hogwarts en un pequeño rincón que a mí me gustaba llamar: el rincón de la magia (the magic corner),con el attrezzo que tanto había costado. Había una señal del andén 9 y ¾, había las gafas de Luna Lovegood, había gafas de Harry Potter, la señal de se busca de Sirius Black, sombreros de bruja, bufandas y guantes de Griffindor, capas… Las fotos las hacía un fotógrafo y luego las daba a cada invitado, a nosotros nos dieron todas las que hicieron. Valió la pena el esfuerzo, y también fue un toque especial, el servicio de retoque para las invitadas, que la maquiladora nos ofreció por un precio bastante razonable.

Hicimos las fotos con los invitados antes de entrar al castillo, y luego entramos los dos bailando pasando por todas las mesas antes de empezar a comer. No estaría nerviosa, pero la verdad es que no me entraba mucha comida… Farouk se pasó la cena hablando con la gente, ya que de su parte había venido muy poca, y conociendo a todos. Yo cené con mis amigos en nuestra mesa, y todo era genial. La decoración navideña, el castillo increíble, la cena impecable… Dimos un regalito para cada invitado, una bola de navidad pintada a mano con una pashmina para las mujeres y una corbata para los hombres, que colgaban de los 4 árboles de navidad junto a la chimenea; y también dimos regalitos a los cumpleañeros, los próximos que se casarían, los hermanos, los papás, los niños tenían calcetines de navidad con chuches colgados de la chimenea y un regalo para cada uno… ¡Entró el pastel que era un pastel de copos de nieve y la verdad es que fue precioso! El segundo pastel era para los niños, el sombrero seleccionador que llegó de la mano de la música de Harry Potter… ¡La idea que se me había ocurrido quedó genial! Mi hermano hizo un brindis y nos hicimos una foto preciosa con todos mis hermanos. Llegó la hora del baile…

Nuestro primer baile como marido y mujer fue precioso, la canción, Thousand years… Estábamos en aquel castillo lleno de gente que pareció que se vaciara para nosotros, y bailamos juntos, y disfrutamos del otro y de la idea de por fin poder estar juntos, después de nuestra larga espera.

Al terminar, nos fuimos a bailar a la bodega, la música genial, la barra libre perfecta (servían unos copones enormes) y el candy bar se convirtió para nosotros a petición mía en un nougat bar, una mesita de turrones y dulces navideños al estilo navideño y romántico de la boda.

Todo, absolutamente todo, con sus imperfecciones, contratiempos y descuidos, quedó perfecto… Fue un día lleno de emociones, sorpresas, lágrimas y sobre todo muchísimo amor y alegría y es por eso que creo que fue el mejor de mi vida.

Gracias Bodas.net por acompañarme en mi camino al altar, por darme muchísimas ideas, por servirme de compañero de lágrimas en los debates cuando las cosas iban mal y por llenarme de consejos cuando los necesitaba.

Gracias Ángeles Atelier porque no tengo palabras para describir lo increíblemente bien que se hizo el trabajo, con mucho amor y cariño, con la elegancia que te caracteriza, creaste el vestido de mis sueños, el que yo había imaginado, y gracias a ti, de la nada, se hizo realidad el diseño que estaba en mi cabeza.

Gracias Verónica y Marta de Ángeles Atelier, sin vosotras no sé cómo habría podido organizar mi boda a distancia.

Gracias a Vocal Bliss por poner la banda sonora a nuestro enlace, nuestra ceremonia quedó preciosa, sublime, inmejorable, para mí era muy importante y superasteis todas mis expectativas.

Gracias al catering Joker por la paciencia que tuvieron con nuestros menús especiales, nuestras cuentas y nuestras peticiones… Fue un placer y un regalo trabajar con vosotros.

Gracias a Olga, el ama de llaves del Castell de Santa Florentina, que es un encanto, por ayudar como lo hiciste y tener el castillo impecable, y también a Nikita, administrador del Castillo, por hacer el proceso fácil y rápido.

Gracias a Egovolo por los zapatos preciosos que tienen, pero sobre todo por el trato personalizado y con mucho cariño que ofrecen a todos sus clientes. Tenéis una amiga.

Gracias a la empresa de flores por los preciosos arreglos florales que hicieron, el arco de flores quedó precioso, el ramo era perfecto y los demás arreglos quedaron increíbles, no lo hubiera imaginado mejor.

Gracias a Casar-se a Catalunya por las dos páginas que dedicasteis a Ángeles Atelier que como resultado siempre tendré publicado en una revista fotos de mi boda, como si de verdad fuera una princesa.

Gracias a Disco Digital Music por poner música en el aperitivo, banquete y discoteca. La música fue perfecta, el fotomatón un gran acierto y trabajar con vosotros lo mejor, el servicio calidad precio es inmejorable y el trato al cliente muy dedicado y con mucho cariño. Quedé super contenta.

Gracias Eibash make up por dejarme a mí y a mis hermanas monísimas de la muerte, te recomiendo fijo. Me encantó el maquillaje y el pelo.

Gracias a Camera Obscura por sus increíbles fotos, por su dedicación y su atención al detalle y por su paciencia con nosotros. Sois un regalo en vuestra profesión. Seguid disfrutando como lo hacéis, se nota en el resultado.

Chicas y chicos, gracias a todas y todos… Mi consejo, tened nervios… Pero que sean de emoción, una emoción que os deje disfrutar de ese momento único que estáis viviendo y que sólo pasa una vez en la vida.