La boda de Emilio y Carla en Sevilla, Sevilla
Modernas Otoño Azul 4 profesionales
El 02/10/2021 77 0 0
E&C
02 Oct, 2021
El día de nuestra boda
Nuestra boda fue mágica, la buena vibra de nuestra familia y amigos nos acompañaron todo el día. No tengo palabras para agradecer a todos el estar allí. Les cuento un poco, trataré de resumir. Desde que me desperté, la emoción e ilusión estaban allí presentes. Mi hija, mi madre, hermana, sobrina, amigas, estuvieron en el hotel desde la noche anterior para que a las 6 am empezáramos a arreglarnos. La maquilladora y estilistas estuvieron en punto y nos pusieron bellísimas a todas. Allí reinaba la felicidad y, aunque no crean, no había nervios, todo fluyó en armonía.
Nuestra boda era a las 12 y éramos 9 incluyendo a las peques, con 1 maquilladora, de Tuiyo, que nos hizo fotos espectaculares. Por otra parte, el novio se arreglaba en casa de sus padres. Acá también la madrina poniéndose bella y el novio y su padre muy guapos (sobre todo el novio). El coche llegó superpuntual, y yo que soy una fatiga llegué a la iglesia a las 11:36 (casi antes que el novio. Igual dimos vueltas antes para estar en punto, tal como se lo había prometido al sacerdote).
Seguir leyendo »La ceremonia fue mágica, nada tradicional, muy especial y emotiva. Allí los nervios y los sentimientos afloraron. El novio guapísimo, la música que nos acompañó, divina; la buena vibra de todos fue lo alucinante, fue como un lindo sueño. Debo decir que nunca imaginé que me casaría y menos de esta forma. Somos una pareja madura y lo disfrutamos muchísimo. Nos ayudó mucho Rocío, Tuiyo, quien fue nuestra coordinadora de bodas, puso todo su esfuerzo para que todo fluyera y guio a nuestros familiares y amigos en todo momento.
El banquete divino, en el Club de Golf el Zaudín, la selección de aperitivos, almuerzo y postre gustaron mucho, no faltaron ni jamón ni tequeños, nuestros invitados estaban encantados. Un brindis muy especial, en la entrega de regalos pudimos saludar y agradecer a todos por su grata compañía. Llegada la barra libre, el novio (ahora mi esposito), sorprendió con unas bellas y sentidas palabras, para luego dar inicio al baile. La canción que elegimos era muy especial, se llama Venezuela, tiene significado especial, además de ser de mi tierra (casi todas las noches nuestra hija pide que la cantemos antes de dormir).
Para mover un poco más el cuerpo, el siguiente baile fue coreografía con nuestra hija, Madre Tierra. Acá se unieron a la coreografía nuestras amigas y familiares cómplices, con previa práctica. La barra libre, el baile, hora loca... Edu, nuestro DJ de Evenfri, estuvo a tope, de una vez intuyó qué nos gustaba y la pista de baile no estuvo vacía en ningún momento, creo que nunca había bailado tanto en mi vida. Los peques disfrutaron un montón. Pensando en ellos y sus padres, contratamos monitoras que con juegos y bailes en un patio gigante, estuvieron pasándola superbién (eran 26 niños).
Para resumir, nuestra boda fue mágica, superó nuestras expectativas. El día se nos hizo muy cortito, jamás lo olvidaremos. Somos afortunados y bendecidos. PD: Amé el vestido de novia, de Novias Victorioso, y encontré mis zapatos azules, así que sentía que era la novia más hermosa.
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