La boda de Diego y Clara en Huelva, Huelva

El día de nuestra boda

La mañana amaneció sorprendentemente soleada y el día quedó radiante después de muchas semanas oscuras y lluviosas. Estábamos tranquilos porque, la verdad, teníamos otras preocupaciones, y además la ceremonia religiosa era en interior de la Parroquia de San Bartolomé y el hotel Hacienda Montija (San Juan del Puerto) donde lo celebramos, tenía previstos espacios para sol/lluvia, pero aun así el día acompañó muchísimo y tanto nosotros como los invitados disfrutaron mucho. El hotel, con su propio catering, nos ayudó muchísimo con todos los preparativos, desde la prueba del menú al último detalle decorativo, y elegirlos fue todo un acierto. Calidad y servicios excelentes y al día siguiente en el desayuno incluido pudimos despedirnos de los invitados que venían de fuera. El DJ Javier Franco, de Jaleo&Sabor (Huelva), supo hacer que todos lo pasaran fenomenal y su animadora infantil fue el de élite para los más peques. Mi padre y mi hermana prepararon todo el jardín, fue fantástico, y también la decoración tanto de la propia hacienda como del florista elegido, Octavio (Beas-Huelva), y los centros de mesa handmade gracias a mis suegros. Hicimos regalos solidarios que encantaron, gracias a la AECC, a ellos y a ellas les repartimos alfileres artesanales de minibiznaguitas hechas por Bizelis (Málaga). Mi hermana Leticia trajo de Valencia el punto pirotécnico de bengalas de humo de colores. Torres Joyeros (Málaga) nos crearon las alianzas ideales para nosotros, que el hermano del novio, Javier, nos llevó al altar. Ahora estamos en proceso de selección de las fotos y edición del video con Mithos Fotografía (Sevilla) y Juanjo, su colaborador, que está siendo difícil porque nos gustan todas. Estuvieron a la altura de las circunstancias, que fueron algo particulares ese día, y se adaptaron a la perfección a todos nosotros y nuestras necesidades. Muchos de los proveedores fueron elegidos a través de Bodas.net, todo un acierto. Gracias. No quiero dejar de mencionar a Rayas (Huelva) que vistió guapísimo al novio y a la fantástica modista, Ana Milena, de Bridalart (Benalmádena, Málaga), que restauró con sumo cariño y detalles el vestido de mi madre para que yo pudiera lucirlo también en el gran día, a Rosa que me maquilló a la perfección y también a la creadora de mi ramo de flores preservadas De Apellido Flamenca (Sevilla) que hizo realidad todos mis sueños y de las damas de honor (María, Aurora y María S.). Y como, por último, pero por especial, que fue para nosotros en todo el proceso a mi gran amigo Pedro, de Peluquería Aries (Beas), que tuve el honor de que me peinase, eligiese mi tocado de ensueño y, en muchos sentidos, ¡salvase la boda! Mis hermanos nos sorprendieron con la bendición papal, fue un detallazo. Mi algo nuevo fueron los pendientes regalo de mi suegra, mi algo viejo, un colgante de mi madre que iba increíblemente a juego con los pendientes sin verlos, como cosa del destino, mi algo prestado fue el velo de mi hermana Carolina y mi algo azul mi sobrina, la niña de mis ojos, que iba junto a mí hacia la iglesia guapísima, vestida de azul y leyó para nosotros en la ceremonia, y un detalle en el propio colgante y en la liga que me regaló mi amiga, Sofía. Un gran amigo, Alfonso, nos regaló llevarnos en su reluciente Mercedes clásico perfectamente adornado para la ocasión. ¡¡Fue genial!! Nuestra amiga, Gema de San Juan del Puerto, con su torrente fantástico puso la voz en la Parroquia a son de guitarra flamenca para erizarnos la piel a todos. Detallazo de mis suegros también. Agradecer desde aquí a todos ellos, que lo hicieron posible, y a quienes fueron testigos de todo ello: Patricio, Rocío, Jose, Inés, Pepe, Rocío P., Luis, Alberto y tantos que se me quedan en el tintero. Fue, sin duda, el mejor día de nuestra vida. Seguido de una inolvidable semana en México, Riviera Maya, perfecta gracias a Madox Viajes.