La boda de Carolina y Eric en Madrid, Madrid
Al aire libre Verano Rosa
C&E
15 Sep, 2012El día de nuestra boda
Nuestra boda fue por lo civil el viernes 14 de septiembre a las 12.45. Fuimos muy poquitos pero los suficientes; padres, hermanos, un amigo y nosotros. Ese día tuve una sorpresa, comer todos juntos con una tía que por problemas con la familia casi no vemos. Al no estar mi padrino (su marido) me hizo mucha ilusión verla y compartir con ella ese día, ya que con mi tío es imposible (falleció 7 meses antes de mi boda). Después de la comida fui a la pelu a prepararme para el día siguiente; pelo, uñas, cera... Después me despidí de mi marido ya que dormíamos cada uno en casa de nuestros padres. Y después cena tranquilamente con mis padres. Esa noche, para mi sorpresa, estaba super tranquila y dormí muy bien a pesar de que estuve hablando por whatsapp con él hasta la 1.30 de la madrugada.
Sonó la alarma del móvil, ¡era el gran día! A las 7.30 me desperté con un sms de mi niño y desde ese momento supe que ese día sería fantástico. Me duché y a las 8.30 estaba en la pelu con mi madre. Mientras la maquillaban hablaba con él por sms. Llegó mi turno, me maquillaron y peinaron, "esta no soy yo" decía, nunca me había visto así, ¡mi cara era de total felicidad!
Seguir leyendo »Subí a casa a preparar todo para las fotos. ¡Ring ring! ¡Es el fotógrafo! Estábamos todos sin vestir y yo no tenía nada colocado. Mi madre vistiéndose... ¿y quién me ayuda a mí? Cogí a mi hermano y mi cuñada por banda para que me ayudaran a ponerme el vestido. ¡La novia está lista! Comenzó el reportaje, primero abrochándome el vestido, poniéndome los zapatos, la liga, ahora con el padrino, los padres, los hermanos ¡y los helicópteros de la manifestación que no paraban! Era la hora de salir y mi tío que me llevaba en su coche no llegaba por la manifestación (todo el centro de Madrid cortado). Después de diez minutos llegó y cogimos el coche. Tras hora y media de atascos y calles cortadas, llamadas del novio nervioso porque llegaba tarde...¡llegué y empezó mi día!
Fue subirme a la calesa y pasé de estar super tranquila a ser un manojo de nervios y emociones. Cogida del brazo de mi padre crucé toda la alfombra con "La Salve Rociera" de fondo hasta llegar a donde estaba mi niño. Nada más verle le di un abrazo y un beso (no podía más, lo necesitaba). Entre lágrima y lágrima transcurrió la ceremonia, super bonita y con mucha emoción. El momento de los anillos y el "sí quiero" fue precioso con la canción de "Quiéreme" de fondo. Luego mi hermano y cuñada nos dedicaron unas palabritas y después de los tres kilos de arroz (lo sé porque lo preparé yo) fuimos a hacernos el reportaje mi marido y yo mientras los invitados esperaban en el cóctel.
Llegamos al cóctel y después de saludar a todos nuestros invitados y hacernos fotos con ellos, pasamos al salón con la canción de Queen "Who wants to live forever". Brindamos con las copas que hice cogiendo la idea de una compi del foro. Comimos fenomenal y liándola un poquito con "viva los invitados". Era la hora de la tarta ¡y venía con sorpresa para el novio! Los muñecos de la tarta eran de su serie favorita de peque, "Dragon Ball". Con la canción de la serie entró la tarta y los muñecos, ¡se quedó con la boca abierta! Después llegó el momento de cortar liga, culotes, corbata, calzoncillos...¡y porque no teníamos más donde cortar!
Con la banda sonora de "Pretty Woman" repartimos los regalos: alfileres, puros y cigarros. Fuimos todos a la discoteca y...sonó la canción de "Bailar pegados" (la primera canción que bailamos los dos hace 9 años) En ese momento no pude aguantar la emoción y lloré como una niña pequeña. Tenía que cumplir mi deseo de bailar "Grease" en mi boda así que hice como si se hubiera rallado la canción, nos "enfadamos" ¡y sonó mi canción! Nos pusimos los dos a bailar como John y Olivia y para terminar el baile invitamos a unirse a todos con la canción de "Voy a pasarmelo bien" de Hombres G. Y ya empezó la discoteca, no paré de bailar una canción tras otra, solo quería disfrutar y disfrutar y pasármelo genial ¡y lo conseguí! Sonó la canción de "Danza Kuduro" y todas las chicas de la despedida (contrataron a un animador y nos enseñó la coreografía) nos subimos a la tarima ¡y a bailar! Después de unas horas de baile necesitaba quitarme los tacones porque los tacones del viernes me hicieron herida y cual fue mi sorpresa ¡que se me olvidó la maleta para cambiarme en casa! Así que decidí quitarme los tacones y seguir disfrutando.
A las 12 de la noche nos fuimos al hotel y terminó mi gran día, fue todo un sueño hecho realidad y una hoja escrita en un cuento de hadas.
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