La boda de Carlos y Laura en Tacoronte, Santa Cruz de Tenerife

Justo después de la ceremonia los invitados pasaron a tomar el cóctel en una terraza con un barco reconvertido a barra de bar, y aprovechamos el momento para saludar a todos, ni Carlos ni yo disfrutamos del picoteo del cóctel, porque era mucha la emoción y comer no era nuestra prioridad, pero sí que todos los invitados, celiacos y vegetarianos incluidos, disfrutaron de las opciones del menú del cóctel.

A las dos de la tarde comenzamos a ocupar nuestras mesas, que habíamos marcado con los nombres de diferentes lugares de la isla y con las maravillosas ilustraciones en acuarela de ReinaIlustra. El menú estaba delicioso, todos los invitados lo disfrutaron un montón, y los niños no paraban de jugar y de preguntar a los camareros por el postre. Mención especial al equipo de Parque Dragomar, que estuvo muy pendiente de todos nosotros, asegurándose de que estuviéramos cómodos, y con una paciencia infinita con tanto niño (unos 12 peques) alrededor.

Cuando todos habíamos tomado postre y café, y ya empezábamos a movernos entre las mesas para charlar con otros invitados, fuimos al Tanque a inaugurar la barra libre y la fiesta con el baile de los novios. DJ Kevin nos esperaba allí con la canción que le habíamos pedido y dimos comienzo a una fiesta en la que muchos invitados se quedaron en la pista de baile, pero otros optaron por moverse hacia otras zonas de la finca, sacarse fotos con la iluminación que habíamos contratado, buscar rincones desde los que ver el atardecer o tomarse un cóctel en una zona más apartada de la música. No faltó una caja de puros, traída por uno de los mejores amigos de Carlos, que se convirtió en la protagonista inmediata de la zona de fumadores.

A las diez de la noche se habían marchado casi todos los invitados, pero todavía quedaban algunos apurando la fiesta hasta el último minuto, de nuevo gracias a la paciencia del equipo del restaurante, que permanecía atendiéndoles con toda su atención y su cariño, aunque ya solo éramos seis personas en la pista.

Un día maravilloso, del que no puedo esperar a ver las fotos profesionales. Mientras tanto, aquí van algunas instantáneas capturadas por los invitados.