La boda de Beatriz y Manuel en Arenas De San Pedro, Ávila

La ceremonia transcurre con normalidad, salvo que el sacerdote quiso que los novios interviniesen mucho más de lo normal, y junto a la música que pusieron la Ronda "Los Pioneros" hicieron de ese momento algo muy especial.

A la salida, pétalos de rosa y confeti. Besos. Muchos, pero que muchos besos y felicitaciones. Nos marchamos al Convento de las Carmelitas Descalzas, hay que agradecer todo lo que han hecho. Se entrega un ramo de flores como ofrenda y nos cantan, bellísimo, algo en latín. Charlamos con ellas y nos dirigimos al pantano a hacernos una fotillos. Los invitados están nerviosos. Llegamos tarde.

Al llegar a la finca, los dueños de Esencia de Gredos nos dan la bienvenida con seguridad privada incluida (todo un guiño y muy acertado). El Catering El Inca 2.0 ofrece un cóctel abundante y exquisito mientras los más pequeños cenan para disfrutar de un gran castillo hinchable.

Fotos, fotos y más fotos. Hasta las narices de fotos, la verdad sea dicha. Al pasar a la cena tocaba bailar una coreografía de Grease que montamos junto a los más allegados. Todo un acierto. Encantó.

Durante la cena hubo sorpresas, flores, tarta de cumpleaños para el abuelo (98 años cumplía ese mismo día, pero el mayor regalo fue ver casar a su nieta pequeña), y mucho más. Después brindis, tarta de bodas y estar con todos, pero como bien nos dijeron: no acabaréis una conversación.

Pasamos a la carpa y allí realizamos el baile nupcial. Era un remix de canciones que nos gustan, pero lo mejor fue el comienzo con "Un mundo ideal" de Aladdin. Muchos invitados la cantaron mientras nosotros bailábamos. Desde aquí agradecer al tío Andrés la realización de un precioso vídeo de la boda que montó en media hora. Nos hizo llorar de lo lindo.

Si queréis saber nuestra opinión, hay que relajarse, dejar que todo fluya y saldrá como tenga que salir. Nosotros volveríamos a repetir mañana mismo.

Gracias.

Manu y Bea.