La boda de Alfredo y Yolanda en Cuenca, Cuenca
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A&Y
13 Sep, 2014El día de nuestra boda
Nuestra boda, más que un día la recuerdo como una continuidad de buenos momentos, de haber tenido un año especial con mucha ilusión y cariño de nuestra gente. Tuvimos 10 meses para ilusionarnos con el gran día y cuando llegó fue genial.
No la hemos vivido con nervios ni angustia, pues tuvimos tiempo para organizarla y de disfrutar cada momento. Nuestra boda comenzamos a vivirla en profundidad ya el día de antes. Pues celebramos con los amigos una gran pre-boda, para dar la bienvenida a todos nuestros amigos y familiares (Decir que me sorprendió la cantidad de amigos por ambas partes que hicieron el esfuerzo de viajar y pasar el fin de semana con nosotros, pues estuvimos rodeados de muchísimos amigos).
El viernes por la noche, llegamos al restaurante Bien Porteño, donde nos habían organizado una gran recepción, no faltó de nada, comida, bebida, música y buen ambiente. Cuando llegué me qué alucinando, estaban con nosotros unas 100 personas. Así que disfrutamos de un buen rato en compañía de todos, nuestros invitados se quedaron hasta altas horas, y nosotros dos aunque teníamos ganas de más cachondeo nos fuimos a descansar a una hora prudente. Y llegó nuestro día. Nos despertamos en nuestra casa y nos despedimos hasta la tarde. Estaba muy ilusionada por cada momento y muy contenta de estar tan bien acompañada en todos los preparativos por amigas tan queridas y especiales.
Seguir leyendo »A las 11, peluquería y maquillaje, (momentos muy divertidos con mi madre y una amiga) y sin nervios, al terminar nos fuimos tranquilamente a comer al sitio desde donde yo salía hacia la iglesia. Reservamos varias habitaciones en "La Casita de Cabrejas" un sitio precioso, rodeado de naturaleza y con muchísimo encanto. La comida fue muy tranquila, en el exterior con mis padres y dos de mis mejores amigas y sus maridos. Y a las 3.30 comenzó el jaleo. Llegaron casi todas mis amigas para ayudarme a vestirme y no paramos de reírnos en los preparativos y con las fotos (sólo decir que mi fotógrafo fue genial y majísimo, Grupo Desenfoque). Cuando llegó mi hermano y mi sobrino casi me emocionó, que guapos y elegantes. Mi sobrino me trajo mi ramo de novia y mi hermano me trajo el coche con el que me llevaría hasta el altar (un escarabajo rojo).
Cuando llegué a la Iglesia (a las 5 de la tarde) acompañada de mi padre, de mi hermano y mi sobrino, y vi a tanta gente vestidos tan guapos esperándome con cara de alegría no me lo podía ni creer. No estaba muy nerviosa, solo emocionada y feliz, pero cuando entré con mi padre dentro de la Iglesia y vi al novio, entonces sí que me emocioné al 100 por 100, pues mi marido tenía una sonrisa y una mirada especial que no la había visto nunca antes (y eso que llevamos juntos 14 años). Mi entrada a la Iglesia lo recuerdo con muchísimo cariño y emoción, fue preciosa. Entré del brazo de mi padre (que orgulloso estaba) al son de la canción de la película "La vida es bella", tocada por un quinteto de metal, regalo de mis amigos de Teatro. Tuvé una ceremonia muy bonita, con palabras de cariño del párroco de mi pueblo, y aún más emotivas las palabras que me dedicaron mis dos grandes amigas, que nos hicieron emocionar al novio y a mí (y a más de un invitado).
Al terminar la ceremonia y salir de la Iglesia, y después de que nos lanzaran kilos y kilos de arroz y pétalos, nos quedamos con los amigos y familia tomándonos las primeras cervezas del día, no somos unos novios muy típicos y el tema de las fotos mi novio no le gustan nada, así que nuestro reportaje fue muy breve, y así tuvimos más tiempo de estar con nuestra gente. A las 7 abandonamos a nuestros invitados para ir hacia el Restaurante La Playa, y aprovechamos para hacernos unas fotos preciosas en el mismo recinto, al lado del rio. La temática de nuestra boda fue " La caperucita y el cazador" (pues él es cazador, y yo soy educadora infantil y me gustan mucho los cuentos, así que decoramos todo con la temática de los cuentos infantiles y quedó precioso). A las 8.00 comenzaba el cóctel, y sorprendimos a nuestros invitados recibiéndolos a todos en la entrada, no queríamos perdernos ni un minuto de nuestra boda con nuestra gente. Fue super divertido ver sus caras que no se esperaban que ya estuviéramos allí. Y tuvimos mucho tiempo para estar con ellos antes de la cena en ambiente muy relajado. Y la cena, pues fue estupenda. Con muchos invitados y ganas de pasárnoslo muy bien, hubo muchas sorpresas para nosotros (y alguna que otra para mis amigas). Tuvimos de todo, una cena estupenda, un ambientazo increíble, y barra libre hasta las 6.30 de la madrugada. Y al terminar la boda, mi marido y yo pasamos la primera noche en la Casita de Cabrejas, donde nos esperaba la sorpresa en la suit de despedir la noche con una botellita de cava y unos bombones.
Me he decidido a escribir mi relato de boda, porque de verdad fue un día increíble y estoy super agradecida de todos los detalles que tuvieron con nosotros las amigas y amigos y mis primos. Pues para mí la boda significaba poder compartir con toda nuestra gente la felicidad que sentimos Alfredo y yo de estar juntos y nos acompañaron todo el mundo con mucho cariño. Solo decir que gracias a esta web, me ayudó a sacar muchas ideas que utilicé en mi boda (ideas del ramo de novia, cesta de baños, regalos a amigos, libro de firmas con cámara instantánea, viaje de novios) y también me hizo compartir mis ilusiones con las novias de la web. Y que nos rodeamos de los mejores profesionales de Cuenca para que todo saliera genial.
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