La boda de Alfonso y Amalia en Sevilla, Sevilla
De noche Verano Azul 8 profesionales
El 20/08/2016 776 0 0
A&A
20 Ago, 2016
El día de nuestra boda
¡Buenas! ¡Mi crónica por fin! ¡Bueno la tarde de antes fue ajetreada! Estuvimos limpiando el piso, llegaba gente fuera, quedamos con los amigos para ensayar el baile con ellos, llegué a casa de mis padres a las 23 horas, pero fue genial. Por la mañana temprano miré varias veces el reloj antes de levantarme a las 9, para levantarme antes y desayuné con mi madre tranquilitas.
A las 13 horas llegó mi amiga y peluquera y comenzó a peinarme, luego el maquillaje y luego todo a mi madre, se fue después de almorzar y antes de que llegara el fotógrafo. A las 16 horas, ¡toc toc!, ¿quién es? ¡El fotógrafo! Hicimos fotos, vistiéndome, con el traje, con mis padres y mi hermano ya empezaron los nervios, pero lo calmamos brindando con una copa de champán.
A las 17:45 horas llaman de nuevo a la puerta, ¡qué quedan 15 minutos! Teníamos que bajar al coche y bajando mis vecinos diciéndome cosas bonitas, y abajo el Rolls Royce reluciente. Lo primero que dije vámonos que tengo que ser puntual si no me riñen en la Iglesia. Pero nos fuimos y llegamos a las 18 horas clavadas a la basílica de la Macarena. Estaba expectante en la puerta mis damos de honor, mi madre, familiares más cercanos, ahí me empezaron a temblar las piernas, ¡papa respira y para adelante, dije! Cuando llegué al altar, mis lágrimas cayeron tras darle dos besos al novio, pero nos agarramos de las manos y ya nos tranquilizamos. La ceremonia fue preciosa, divertida, emotiva. Mis mejores amigos nos dieron las arras y anillos y me decían te quiero amiga, desde primera plana en el altar y luego nos besamos ya como marido y mujer, ahí terminaron los nervios.
Seguir leyendo »Tras besos, fotos, recibimos nuestra primera paella de colores y nos fuimos a hacernos las fotos. Estuvimos en parque de María Luisa y plaza de España. La verdad que hacía calor, pero afortunadamente no tanto como otros días. Algo anecdótico es que la Iglesia estaba de obras por fuera, lo sabía porque la vimos el día antes, pero cuando entré ni la vi.
La llegada al banquete fue triunfal, con mi gran noche de fondo todos los invitados nos hicieron un pasillo y pasamos bailando, todos llevaban un palito con cascabeles y encajes, sorpresa de mi madre. ¡Fue una pasada!
Ya recuerdo fotos, besos, abrazos, ven aquí, tienes que hacer esto, lo otro... Se pasó el día rápido, pero no demasiado, pues intenté beberme cada sorbo y aprovechar cada segundo. La entrada a la cena fue también especial con Uno por uno de Manuel Carrasco, luego Madre tierra con los regalitos a familiares y amigos, y para la tarta Durmiendo en tu ombligo. Entre plato y plato me sorprendió la tuna, el novio me dio la sorpresa y bailamos hasta más no poder, no hubo hombre del convite que se quedara sin bailar conmigo.
Hubo queimada antes de la barra libre, a todos les gustó especialmente a los familiares gallegos, y vino después el baile. Nos defendimos bastante bien con nuestros amigos bailando Cali y el Dandee por fin te encontré y terminamos solos bailando hasta mi final de Il Divo, me lo pasé genial. Después de ese momento 4 horas de barra libre y fiesta. El photocall, el candy bar, la zona de niños, todo repleto de gente pasándolo en grande, y nosotros disfrutando de verlo. Fue una boda fantástica, decir que acabamos a las 7 de la mañana comiendo churros y chocolate, que aprovechamos hasta el final.
Ya pasó el día, pero para mí mereció la pena tanto preparativo, pues puedo decir que ha sido el mejor día de nuestra vida. Animaros a que disfrutéis de vuestra boda y no os perdáis nada.
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