La boda de Alejandro y Lucía en San Fernando, Cádiz
De noche Primavera Rosa 7 profesionales
A&L
14 Jun, 2014El día de nuestra boda
Sin lugar a dudas, fue el día más bonito de mi vida. Después de un año bastante tranquilo y emocionante de preparatorios, por fin había llegado el día.
La mañana en casa de mis padres fue maravillosa. Aún recuerdo a mi madre lo sorprendida que estaba de la tranquilidad que teníamos, ¡pues ella esperaba mucho más movimiento!, pero nosotros nos habíamos encargado de dejar todo listo. Risas, fotos y conversaciones nos acompañaron durante toda la mañana. Me traen el ramo a casa y ya estoy del todo tranquila, ¡mucho más de lo que yo esperaba!
Me ducho y aprovecho para picar algo mientras me peinan. Ahora empiezo a notar lo rápido que pasa el día, porque de repente ya tengo allí a la maquilladora y los fotógrafos. Cuando todavía faltaba una hora, ya me están vistiendo, ¡no me lo podía creer! Pero al final esa hora pasó sin casi darme cuenta. El coche me espera. Salgo de mi casa sin saber siquiera la hora qué es. En realidad intuyo que llego tarde, pero también lo había previsto así. Un paseíto a la novia por las calles y a la iglesia. Todo está como esperaba, los invitados todos dentro esperándome y entonces ocurre, ¡toda le emoción contenida se me viene de golpe! Miro las maravillosas lámparas que alumbran la iglesia y un suspiro hace nacer las lágrimas. Recorro aquel camino, con el que tanto había soñado y al final del mismo, él esperándome con las lágrimas también saltadas, y siento cómo se me salta el corazón. No era más que el comienzo de una ceremonia realmente memorable, pues el sacerdote, al que estamos inmensamente agradecidos, hizo de ella una auténtica maravilla; aún hoy me lo recuerdan mis invitados.
Seguir leyendo »Salimos hacia las fotos; aquí aprovechamos para hablar por fin el uno con el otro tranquilo y tomar aire para lo que quedaba por llegar. Llegamos a los aperitivos, que estaban deliciosos. ¡Pero ya no comí más en toda la noche! La entrada al salón fue muy emotiva para mí, porque tenía preparada una canción especial para mi madre, que no paraba de llorar. Pasamos la cena y la entrega de regalitos (mi ramo se lo di a mi madre) y por fin la discoteca, donde disfruté como una enana el baile que habíamos preparado. También preparamos nosotros nuestro propio photocall, muy a nuestro estilo. Y finalmente el reparto de ligas, que fue bastante divertido, ¡especialmente porque yo misma le puse una a mi cuñado!
Cuando me doy cuenta la noche ya ha pasado y empiezo a sentir algo que todavía hoy me dura: una inmensa nostalgia y una gran alegría de que todo saliera tan bien. Por supuesto, no fue perfecta, pues nos faltó gente importante, pero disfrutamos ese día como no habíamos esperado y sentimos una felicidad plena. Son muchas cosas, sentimientos, detalles y anécdotas que me dejo en el tintero, pero son tantos que es difícil ponerlos todos. En todo caso, estoy segura de que muchas ya sabéis de lo que hablo y de que, las futuras novias, lo sabrán en breve. Así que disfrutad cada minuto, observad cada detalle y sed muy felices. Un besazo a todas.
Servicios y Profesionales de la Boda de Alejandro y Lucía




Otros Proveedores
Otras bodas en Cádiz
Ver todas
Inspírate con estas bodas
Deja tu comentario