Se reservó el año antes, ya que con el Covid decidimos darnos prisas en reservar. Un par de días antes de la boda le recordamos dónde tenía que ir a recoger al novio, la hora de la iglesia y la hora del convite. Mi novio (en ese momento) tenía que estar a las 12 h en la iglesia, y a las doce menos diez lo llama, que el coche había tenido una avería, que enviaría otro. Pues ese otro era un Mercedes sin limpiar y sin adornar. La fatiga que pasó mi novio cuando llegó a la iglesia no se le olvidará nunca, ya que llegó a la iglesia a las 12:15. A la salida de la iglesia ya estaba el coche antiguo allí. Supuestamente, cuando lo contratamos tenía el conductor vestido de época (que no lo estaba), una foto de recuerdo (que no nos la dieron) y una botella de champán para brindar (que tampoco estaba). Entonces, el servicio no lo recomendamos porque para ser el día más importante de nuestra vida, no nos ofrecieron lo que venía en acuerdo.

Mil gracias a Óscar por llevarnos ese día al lugar más importante de nuestras vidas. Super agradable y perfecto. Atento a todo, no dudaría en volver a elegirlo. El coche es una pasada, pero su trato aun más.