Desde el principio habíamos trabajado muy bien con ellas en una idea muy particular y personal y nos apoyaron en todo momento para sacar adelante nuestra boda bajo los chopos del abuelo Tras la crisis del cambio de localización por la lluvia, Carmen y Teresa se volvieron locas para lograr mantener la magia de nuestra boda bajo techo. La capacidad de adaptación y el conocimiento y experiencia en la organización de eventos quedaron claros al ver el resultado. Confiamos en ellas totalmente dejando los detalles finales en sus manos porque a nosotros no nos daba la vida y fue la mejor elección. La gente quedó encantada con la comida, la decoración y las flores, que transformaron por completo el salón donde lo celebrábamos. Algunos invitados comentaron que era la mejor comida de boda de su vida. Todo precioso y cuidando hasta el minimo detalle. Hubo comida y bebida de sobra y el servicio fue maravilloso, rápido, eficiente y lo mejor es que nosotros no tuvimos que ocuparnos de nada. Todo estaba perfectamente organizado y coordinado por Carmen y Teresa en todo momento, así que nosotros pudimos centrarnos en disfrutar de nuestra noche.
¡Muchísimas gracias por hacer de nuestra boda un fiestón inolvidable!