Si buscáis un paraíso dentro de la costa catalana, no cabe duda: ¡estáis pensando en la Costa Brava! El litoral de Girona es un auténtico regalo para todas aquellas parejas que sueñan con un Sí, quiero a orillas del mar con un paisaje casi utópico como decorado. No solo es el azul turquesa de sus aguas, el blanco característico de las pequeñas casas que llenan sus pueblos o el carácter pesquero que impregna en muchos casos su reconocida identidad.
Cuna de grandes artistas como Salvador Dalí, Girona es un lugar minado de atractivos que os hará caer rendidos a los pies de su incomparable belleza. Desde Portbou hasta Lloret de Mar, un sinfín de recónditas y sorprendentes calas dan relevo a playas vírgenes que os permitirán evadiros de la realidad y perderos por unos instantes en un ambiente lleno de fantasía.
Es imposible no considerar todo este contexto como un escenario idóneo para una boda de película. Por ello, elegantes hoteles han escogido este punto de la geografía peninsular para alzar sus edificaciones y brindar la posibilidad a los futuros novios de organizar un banquete nupcial con la vista puesta a un horizonte sin igual. Increíbles puestas de sol en algunos de los lugares más privilegiados de esta provincia podrán ser el acompañamiento perfecto de vuestra celebración.
Sus comarcas más meridionales albergan algunos de ellos. Resiguiendo el famoso Camí de Ronda, estos portentosos espacios se emplazarán en ubicaciones inmejorables que dotarán de magia cualquier evento que tenga lugar en su interior.