¡Hola a todo/as! Me gustan mucho las historias que hacen a las personas, todos tenemos una y aquí quiero contarles un poco de la mía y cómo llegue aquí.

Estudié 5 años de hotelería y turismo y, casi a punto de graduarme, dejé todo sin saber qué haría de mi vida.

En el medio de mi proceso terapéutico, con mucha angustia, pensando que había desperdiciado tiempo y sintiendo que estaba "sin nada", sin un rumbo, mi psicóloga me dijo una frase clave: "no estás en la nada, siempre te gusto el maquillaje". ¡Y qué real era!!!
¡Meses atrás, me había autorregalado una clase de automaquillaje para mi cumpleaños y había quedado enamorada! Decidí ir de modelo de una estudiante de la carrera de maquillaje para ver cómo era, y fue entonces cuando cruce la puerta de la escuela y sentí ese "olor a escuela de maquillaje" que me enamoró y aquí estoy, 12 años después, con 12 años de experiencia en esta profesión tan apasionante.

Si bien he realizado todo tipo de trabajos dentro de las posibilidades que ofrece el maquillaje, siempre mi prioridad ha estado, por sobre todo, al mundo de la enseñanza y las bodas.

¡Ser parte del día más feliz de una persona me parece un privilegio hermoso que me regala la vida! Ver la emoción de las familias y amigos, el amor, es algo realmente emocionante.

Sea que quieras casi nada de maquillaje o muchísimo, mi trabajo siempre es escucharte, para poder ayudarte a destacar tu belleza y que te sientas en armonía y feliz cuando te mires al espejo.

¡Hola a todo/as! Hoy les cuento un poco sobre mí.

Al terminar mis estudios no estaba muy segura de qué carrera iba a seguir… Tal como les pasa a varios de los jóvenes hoy en día. En un principio, estudié la carrera de asesoramiento de imagen. Me gustaba, pero no di mucho foco en ese momento. Sin darme cuenta, me estaba metiendo en el mundo de la belleza.

Continué haciendo un profesorado de danza del cual tenía muchas horas semanales de clásico y jazz. En fondo sentía que no era para mí… Un día, hablando con mi marido, le dije que me interesaba el mundo de la peluquería. A mí solo me gustaba peinar, pero no había escuelas en ese momento que brindaran la enseñanza. Hoy por suerte ha evolucionado mucho.

Sin pensarlo, me apunté a la carrera de peluquería. Cada curso que hacía me encantaba y disfrutaba muchísimo. Pasó el tiempo y me perfeccioné tanto en corte, como colorista, actualizando técnicas, siempre en un continuo aprendizaje hasta el día de hoy.

Me apasiona peinar, y, sobre todo, ver la cara de felicidad de cada una de mis clientas. También me divierte trabajar en producciones de fotos relacionadas con la moda. Finalmente, estoy muy agradecida con el camino recorrido y poder trabajar actualmente de lo que más amo uniendo todos mis conocimientos.

Todo lo vivido en una boda realmente es muy emotivo. A las novias que acompaño les digo que disfruten cada momento. Me hace muy feliz saber que una parte de mí las va a acompañar cada vez que miren una foto, o simplemente recuerden su día tan soñado. Acompañarlos en un día tan especial, es una caricia al alma.