Un completo reportaje de boda con Jennifer y Luis
El día B es el más feliz para unos novios, pero los momentos previos y posteriores a este día son igualmente importantes. ¡No te pierdas todas las fotos que Jenifer y Luis decidieron hacer con motivo de su boda!
Desde que comenzaron a planificar su boda, Jenifer y Luis tuvieron claro que querían un álbum de bodas especial, con unas fotos que plasmasen su amor de forma natural. Además, querían recordar cada momento de su boda. Esto no se limita al gran día, si no que abarca diferentes momentos por los que pasa una pareja desde que se prometen hasta ya pasada la boda. El fotógrafo, Antonio Foncea, comprendió las necesidades de esta pareja desde el primer contacto, puesto que así es cómo trabaja.
Nuestro repaso por el completo reportaje de bodas de Jenifer y Luis comienza con el preboda que realizaron en El Buste, un pueblecito que Jenifer visitaba con su familia. La sesión está repleta de besos y momentos románticos que emocionan a todos los que saben qué se siente al organizar una boda. La pareja pudo relajarse y actuar con total naturalidad, ya que casi no se percataron de la presencia de su fotógrafo.
Por fin llegó el esperado día y cada detalle quedó inmortalizado: la preparación de ambos, las miradas, la emoción y la alegría... Antonio Foncea capturó toda clase de instantes mágicos, así como momentos tiernos de la pareja, en los que vemos, por ejemplo, a Jenifer arreglando el prendido de Luis. Los invitados también tienen cabida en un albúm de bodas, sobre todo si son captados en un instante de complicidad, como el que vivían el niño y su abuela en el momento en que Antonio Foncea realizó la fotografía posteriormente premiada por la Asociación de Fotógrafos de Boda en la categoría "momentos".
Tras la ceremonia, celebrada en la Iglesia del Colegio Escolapios, las calles del casco histórico de Zaragoza fueron testigo de la alegría de los recién casados. Después se trasladaron a la finca Espacio Ebro para celebrar el convite, donde Jenifer y Luis vivieron momentos muy divertidos junto a sus seres queridos. Momentos capturados con gran naturalidad, sin apenas posados, que guardarán en el álbum tan especial que desde el principio querían.
Pasado un tiempo, ya sin los nervios de la boda, quisieron terminar su completo reportaje de boda con un postboda bañado por la luz del atardecer en Salou. La pareja se animó a seguir la tendencia del trash the dress y reestrenar el vestido de novia bajo el agua del mar, terminando después con un fabuloso contraluz bajo la ducha.
