Buqués de chucherías para regalar. ¡Deliciosa tentación!

Entre las distintas ideas originales para bodas encontraréis numerosas propuestas con las que sorprender a vuestros seres queridos y con las que marcar la diferencia en vuestro paso por el altar. Pero no son las únicas, ya que también podéis recurrir a sencillas manualidades, muy fáciles de hacer, que además de personalizar al máximo el enlace os permitirán disfrutar de unas divertidas horas de preparativos los dos juntos. Y si al margen de los detalles de boda que habéis elegido para familiares y amigos el día B queréis impresionarlos con una apetitosa tentación, nada mejor que estos buqués de chucherías. Coloridos, divertidos, sabrosos... ¡Lo tienen todo! Encantarán a los presentes –tanto a los niños como a los más mayores–, sobre todo si los elegís a juego con el ramo de novia que lucirá la protagonista de la jornada. Y son muy sencillos de elaborar, así que no tendréis ningún problema. ¿Os apetece descubrir cómo hacerlos? Ya os adelantamos... ¡que se os hará la boca agua en el proceso!

¿Por dónde empezar?

El punto de partida, lógicamente, será reunir todos los materiales. Pero elijáis las que elijáis, es importante que las gominolas sean de tamaños similares, lo que os permitirá combinarlas sin problema y repartir el peso del buqué de forma proporcional. Lo mismo que se tendrá en cuenta a la hora de componer el ramo de novia con peonías, por ejemplo. Del mismo modo, podéis recurrir a chucherías de una misma tonalidad, para que armonicen a la perfección con las ideas de decoración para la boda, o bien a colores muy distintos para que el resultado sea lo más variado posible. En cualquier caso, seguro que será un fantástico regalo para invitados de boda y que todos vuestros seres queridos quedarán encantados con él. ¡Lo podréis incluir entre las diferentes ideas divertidas para la boda! Comenzamos.

¿Qué materiales se necesitan?

Son pocos y realmente muy fáciles de conseguir. Así que no os costará reunirlos todos.

• Diferentes gominolas, como corazones, flores, moras, parisinas...
• Brochetas de madera de unos 15 cm de largo. Aseguraos que son adecuadas para estar en contacto con alimentos.
• Papel celofán de colores. Los podéis elegir todos iguales o bien muy diferentes para que el resultado se vea más variado.
• Cinta de rafia al natural o de colores. Las encontraréis en bovinas de 200 m de largo.
• Celo.
• Tijeras.

¡Manos a la obra!

Con todos los materiales ya preparados, llega el momento de empezar a montar los buqués. Los pasos son muy sencillos.

• 1. Para empezar, coged las brochetas de madera e insertad en ellas las chucherías en el orden que queráis. No se trata de rellenarlas por completo, sino que deberéis dejar vacía al menos la mitad, para que luego no haya problema a la hora de juntarlas todas. Lo ideal es que todas las brochetas queden distintas para que el resultado sea diferente a nivel visual.
• 2. Cuando ya las tengáis todas listas, llega el momento de elaborar los buqués. Para ello, juntad todas las brochetas que queráis –entre 8 y 10 en este caso– y atadlas con la cinta de rafia por la parte inferior, asegurándoos de que quedan bien sujetas.
• 3. A continuación, envolvedlas con el papel celofán de colores. Para aseguraros que este no se abrirá, sujetad la base de los buqués con celo.
• 4. Finalmente, sobre el celo colocad la cinta de rafia a modo decorativo y como sujeción extra, dándole varias vueltas de forma que quede bien firme. ¡Los buqués ya estarán listos!

Y un último consejo. Si vais a preparar los ramos de gominolas unos días antes del enlace, aseguraos de cubrir las chucherías por completo y con cuidado para mantenerlas bien frescas. Un papel de celofán os resultará de gran ayuda en esta tarea.

Seguro que estos detalles originales para bodas harán las delicias de todos los invitados cuando se los encuentren en sus respectivos sitios o bien formando parte de las ideas para el candy bar. Sea como sea, triunfaréis. ¡No os quepa ninguna duda!

Lo que está claro es que con estos fantásticos obsequios, quienes recibieron vuestras invitaciones de boda se sentirán muy queridos y afortunados, pues los habréis hecho pensando exclusivamente en ellos y con vuestras propias manos. Un presente lleno de cariño y delicioso que sabrán apreciar como tal. Igual que también valorarán la variada playlist de canciones de bodas que los pondrá a todos a bailar. ¡Endulzad vuestra mágica cita nupcial!