¿Oficiante o familiar para la boda civil?

Ya habéis tomado muchas decisiones importantes en lo que a la organización de la boda se refiere pero, ¿tenéis claro cómo vais a celebrar vuestro enlace? Si habéis optado por un "sí, quiero" civil pero no os gusta la frialdad de la "firma de papeles" en el juzgado, debéis saber que hoy en día son muchas las parejas que deciden celebrar después su propia ceremonia. En ese momento ya estarán legalmente casadas, pero eso es algo intrascendente cuando lo que se busca es una celebración del amor, ¿no os parece?

Así, muchos de los lugares para boda que encontraréis en el portal, ya sean fincas, masías, bodegas u hoteles, por ejemplo, disponen entre sus instalaciones de bellos jardines o terrazas en los que podréis intercambiar las alianzas como siempre habéis soñado. Estas ceremonias pueden ser totalmente tradicionales o bien personalizadas.

Un oficiante de bodas profesional será, sin duda, el más indicado para oficiar este tipo de ceremonias y el que mejor sabrá cómo llevarlas, consiguiendo que todo se ajuste a vuestros gustos e ideas. Pero también un ser querido puede hacer este papel. Descubrid mucho más sobre quién puede oficiar una boda civil a continuación.

• Oficiante de bodas
• Un familiar muy especial
• Más opciones para oficiar una boda civil
• Guion para la ceremonia

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Oficiante de bodas

Si optáis por un oficiante de boda civil profesional, reuníos con él antes del gran día y explicadle cómo queréis que sea la ceremonia. Con sus bonitas palabras y su experiencia, él o ella se encargará de que ese momento tan especial de vuestras vidas sea realmente único. Es decir, se adaptará a vuestro estilo, a vuestros valores y a vuestras peticiones para que disfrutéis de una ceremonia 100% personalizada y fiel a vuestra esencia. ¿Cómo? Estudiando cada detalle –como las lecturas, el momento del intercambio de las alianzas y la música– y gestionándolo todo para que el resultado sea el esperado. 

Y es que un oficiante de bodas profesional es una figura clave, ya que será el encargado de seguir el guion de la ceremonia, quien dará paso a las diferentes lecturas y discursos, y el responsable de dirigir las ceremonias simbólicas que hayáis elegido. Además, tiene una gran experiencia en hablar frente a grupos numerosos de personas, está acostumbrad/a a tratar con diferentes tipos de público y sabe cómo mantener el interés y la atención de los invitados durante su discurso.

Destacar, por otro lado, que muchos de estos oficiantes de bodas se encargan de la coordinación el día de boda, de los servicios complementarios –como el atril, la microfonía y los artículos especiales para hacer diversos rituales– y, en algunos casos, ofrecen incluso un servicio de asesoría nupcial. Y es que del mismo modo que no hay dos parejas iguales, no puede haber dos ceremonias idénticas. 

Oficiantes de bodas

Un familiar muy especial

¿Quién más puede oficiar una boda civil? Si tenéis la suerte de tener un familiar muy cercano, capaz de hablar en público con soltura y simpatía, podéis hacerle muy feliz si le pedís que se encargue de oficiar vuestra boda. Puede ser uno de vuestros hermanos, padres, primos, tíos e, incluso, abuelos. Al tratarse de alguien conocido, sus palabras estarán llenas de cariño y demostrarán lo mucho que os quiere y lo importantes que sois en su vida. Y, de este modo, la ceremonia será entrañable para todos y tendrá realmente un sabor y una personalidad únicos. 

Más opciones para oficiar una boda civil

¿Quién puede oficiar una boda civil sin validez jurídica? Como comentábamos al principio, lo habitual es que las parejas se decanten por los oficiantes de bodas profesionales y, en menor medida, por un familiar. Pero también existen otras opciones a la hora de oficiar una boda civil.

Uno de vuestros mejores amigos

Es una persona con quien habéis pasado muchos ratos juntos, con quien habéis compartido momentos increíbles y que os conoce casi mejor que vosotros mismos. Así que seguro que tiene muchas anécdotas que contar y que la ceremonia resultará de lo más emotiva y emocionante para todos los presentes. ¡Y elegirlo estrechará aún más vuestra amistad!

Si os ha ofrecido su ayuda en la organización de los diferentes preparativos nupciales, seguro que estará encantado/a de participar en un momento tan emotivo de vuestras vidas. ¡Será todo un honor para él/ella! Y es que actuar como oficiante de boda civil no es algo que pase todos los días.

Una persona a quien admiráis especialmente

¿Sentís una gran admiración por un periodista, un escritor, un actor o un político de vuestra localidad? No es frecuente que las parejas pidan a este tipo de personas que oficien ceremonias "libres", por lo que es posible que se sientan halagados y accedan a hacerlo. No renunciéis a esta posibilidad antes de tiempo. ¡Con ellos como oficiantes de bodas, la vuestra será una ceremonia de boda civil llena de emociones!

Un profesor o profesora

¿Recordáis a aquella profesora de instituto que se comportaba más como una amiga que como una maestra? ¿O a aquel maestro que supo contagiaros el amor por la literatura? ¿Seguís en contacto con alguno de vuestros tutores? Los profesores son personas cultas y acostumbradas a hablar en público, por lo que pueden sorprenderos a todos con un discurso muy profundo si les pedís que sean ellos los encargados de oficiar una ceremonia acompañada de música para bodas civiles. Actuar como oficiante en vuestra ceremonia civil de boda será todo un honor para ellos y un halago para vosotros.

Un médico o terapeuta

¿Tenéis en las familias a un médico de toda la vida que os conoce desde que nacisteis? ¿Acudís a clases de meditación o hacéis terapia con alguien que se ha convertido en una persona importante para vosotros? Esta elección puede ser muy acertada como oficiante de bodas, ya que los profesionales de la salud suelen tener una gran empatía. Y podrán comentar anécdotas sobre vosotros con conocimiento y, sobre todo, mucho cariño.

Guion para la ceremonia

Es importante elaborar un guion para que el oficiante de bodas –sea quién sea– tenga las ideas claras y la ceremonia se desarrolle de manera fluida. Este es el guion de una ceremonia civil divertida y personalizada.

• Presentación a cargo del oficiante. Una vez la pareja esté en el altar, el oficiante explicará el motivo de la reunión y hablará brevemente sobre vosotros: cómo os conocisteis, alguna anécdota de vuestra historia de amor y su propia satisfacción por compartir un momento tan especial con vosotros.
• Discursos de vuestros seres queridos. Familiares y amigos no querrán desaprovechar la ocasión de dedicaros unas emotivas palabras. El único requisito: que sean breves para que la ceremonia no se alargue más de la cuenta.
• Lecturas de los artículos civiles. El oficiante de bodas será el encargado de leer los artículos 66 a 68 del Código Civil.
• Preguntas del oficiante. Llega entonces el momento más esperado: el del "sí, quiero" por parte de ambos contrayentes y el del intercambio de alianzas.
• El beso. El maestro de ceremonias os declarará marido y mujer, marido y marido o mujer y mujer y ya podréis besaros. ¡Un momento inolvidable!

Como veis, lograr la boda de vuestros sueños es mucho más sencillo de lo que podáis imaginar y, para conseguirla, la personalización es básica. Algo que, con la ayuda de un oficiante de bodas profesional, os resultará mucho más sencillo. ¿Preparados para disfrutar de un gran día a vuestra medida?

Y ahora que ya sabéis quien puede casar por lo civil, descubrid más sobre estas ceremonias:

• Organizar una boda civil: la guía más completa
• Ideas para decorar el pasillo de la ceremonia de boda
• Ceremonia de la arena: todo lo que queréis saber
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