¿Y si no me gusta mi anillo de compromiso? Descubre qué hacer en este caso
“No me gusta mi anillo de compromiso, ¿qué hago?”. ¡Tranquilidad! Antes de nada, tómate unos minutos y lee nuestros consejos. ¡Todo tiene solución!
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Llevas tiempo soñando con la pedida de mano... ¡y por fin ha llegado! Un momento inolvidable para los/las dos, que seguro recordaréis toda la vida. Pero, ¿qué hacer si el anillo de compromiso no te gusta o no es lo que esperabas? Ante todo, tranquila. No eres la primera a la que le pasa. Y aunque abordar el tema de un posible cambio del anillo no es tarea fácil, estos prácticos consejos pueden servirte de gran ayuda. ¡Se acabó repetirse "no me gusta mi anillo de compromiso"!
Índice de contenidos
- ¿Qué hacer si no me gusta mi anillo de compromiso?
- Cómo cambiar el anillo de compromiso
- ¿Está bien cambiar el anillo de compromiso?
¿Qué hacer si no me gusta mi anillo de compromiso?
Nada estropea tanto una propuesta romántica como darte cuenta de que no te gusta tu anillo de compromiso. ¿Cómo se lo dices a tu pareja? ¿Cómo se lo confiesas a la gente? ¿Está bien cambiar el anillo de compromiso? Te traemos la respuesta a todas tus dudas y te explicamos cómo puedes actuar llegado el caso.
Darte un poco de tiempo
Si siempre has soñado con un anillo solitario con diamante y has acabado con un anillo de compromiso con halo y un zafiro rosa, por ejemplo, es más que probable que tu primera reacción sea de rechazo. Pero antes de actuar, tómate tu tiempo. Y es que aunque unos pocos días no lo convertirán en tu primera opción, sí tendrás tiempo de descubrir más cosas sobre la joya.
¿Qué puedes hacer? Pruébate tu anillo de pedida solo y con otras joyas, en diferentes momentos del día... Puede pasar que algo que no te llama la atención de entrada acabe convirtiéndose en lo que más te gusta después.
Pregúntale también a tu pareja por qué escogió justo ese modelo. Quizá lo ha hecho porque le recordaba a ti o quizá es un anillo de compromiso que lleva mucho tiempo en la familia y que va pasando de generación en generación. Conocer la historia que hay detrás de su elección puede hacerte ver el anillo desde otra perspectiva. Puede que el flechazo no haya sido instantáneo y que necesites algo más de tiempo para que te guste realmente.
Además, piensa que durante la pedida de mano ya estarás suficientemente embargada de emoción como para valorar en exceso las particularidades del anillo. Céntrate en disfrutar del momento que estás viviendo: contéstale con un "sí" rotundo, abrázalo/a, bésalo/a y da rienda suelta a tu alegría. Lo demás puede esperar.
- La guía más completa: Cómo elegir el anillo de compromiso perfecto
No explicarle tus dudas a todo el mundo
Si sientes que no te gusta tu anillo de compromiso, lo mejor es que lo hables con un familiar muy cercano o con tu mejor amiga, ya que su opinión podría ser muy útil para saber qué hacer. Lo importante es que no lo comentes con todo el mundo antes de hablarlo con tu pareja.
No subir una foto del anillo a redes sociales
Aunque seguro que querrás compartir con todo el mundo que te acabas de comprometer, si aún sigues preguntándote, qué hacer si no me gusta mi anillo de compromiso, lo mejor es que compartas una fotografía de ti y de tu pareja para anunciar la fantástica noticia. Puede ser difícil resistirse, pero evita –al menos de momento– enseñar una foto del anillo en vuestras redes sociales si todavía tienes dudas sobre qué hacer con él.
Pensar bien en cómo decírselo a tu pareja
Si a pesar de todo lo tienes claro –no me gusta mi anillo de compromiso–, ha llegado el momento de hablar con tu pareja. Pero antes de que os sentéis a hablar, piensa bien qué le vas a decir y cómo.
Igualmente, asegúrate de que es un buen momento para hacerlo y elige un lugar relajado y tranquilo. Intenta abordar la cuestión sin que tu pareja se pueda sentir ofendido/a. Es decir, agradécele su elección, pero coméntale que, en lugar de un precioso anillo de compromiso original, tu preferirías un clásico anillo de pedida con diamante, por ejemplo. O que el anillo de compromiso con esmeralda es fantástico, pero el diseño es demasiado grande como para llevarlo a diario. Sé sincera/o con él/ella y háblale desde la confianza y el respeto. ¡Seguro que encontraréis la mejor solución posible!
Escuchar a tu pareja
En toda conversación en pareja hay que tener en cuenta las opiniones, sensaciones y emociones de la otra persona. Por eso, cuando le hayas explicado tus dudas sobre el anillo de compromiso que te ha regalado, escucha también lo que tu pareja tenga que decir al respecto –sobre todo si la joya es un legado familiar–.
Quizá ha escogido el anillo de compromiso sencillo por alguna razón específica: sentimental, práctica… Dialogad tranquilamente, escucharos y tomad una decisión conjunta que os convenza por igual a los dos, ya sea cambiándolo o modificando solo algún elemento. Una dinámica que, sin duda, os funcionará también de maravillas durante la planificación de la boda.
Hacer algún cambio
Como indicábamos en el punto anterior, antes de seguir adelante con el cambio, valorad si es posible modificar alguna parte del anillo. Consultadlo con la joyería donde compró la pieza, ya que nadie como un joyero podrá explicaros cuáles son vuestras opciones al respecto. Quizá sea posible realizar algún cambio que os convenza por igual a los dos. Y en el supuesto de que la pieza sea de herencia, hablad también con la familia para evitar posibles disgustos.
Cómo cambiar el anillo de compromiso
Una vez lo habéis hablado tranquilamente y tu pareja ya sabe que no te gusta tu anillo de compromiso, es hora de ver las opciones que tenéis.
Cambiarlo por otro modelo
Llegados a este punto, es hora de cambiar tu anillo de compromiso por otro que se ajuste mejor a tu estilo y a tus preferencias estéticas. Podrás escoger entre los anillos de compromiso de plata, de oro o de platino, entre los anillos de pedida originales, entre los anillos de compromiso de variadas formas y tamaños... Lo ideal es que vayáis juntos a cambiar la pieza y que ambos participéis por igual en la elección del nuevo anillo. Elegir juntos un nuevo anillo puede ser tan romántico como recibir un anillo sorpresa.
Aunque esta opción dependerá siempre de la política de cambios y devoluciones que tenga la tienda donde tu pareja compró esta joya.
Modificar el diseño de la pieza
Si te encanta el diamante o la piedra de tu anillo pero no estás enamorada del estilo de la pieza, siempre puedes pedir que engarcen la piedra o piedras en la montura que elijas. De este modo, algunos elementos del anillo original seguirán estando en el nuevo, lo que hará que este tenga un mayor valor sentimental.
¿Te gusta el estilo pero quieres una piedra o diamante diferente? Al igual que en el caso del engarce, acercaros a la joyería para cambiar la piedra o piedras del anillo de compromiso. Tal vez desees cambiar directamente una piedra por otra o convertir un anillo de compromiso con una piedra en uno con dos o más.
Es importante también que habléis del presupuesto. Y es que quizá el nuevo modelo o los arreglos superen el precio que tu pareja pagó por la joya. Dejad este punto claro para evitar futuros problemas.
¿Está bien cambiar el anillo de compromiso?
La respuesta es sí. Piénsalo bien. Aunque tu pareja eligió un anillo de compromiso creyendo que te encantaría, finalmente no ha sido así. Quizá vuestros gustos son diferentes o no ha sabido entender al 100% tus señales. No pasa nada. De la misma manera, ¿por qué ibas a sentirte mal por querer que el anillo de compromiso se adapte a tus gustos y a tu día a día? ¡Es importante que te sientas cómoda e identificada con él!
Una vez que ya hayas aclarado y solucionado el tema de no me gusta mi anillo de compromiso, ya estarás lista para empezar con todas las tareas de planificación del que, sin duda, será uno de los días más felices de tu vida. Y recuerda: en el diálogo sincero y respetuoso encontrarás las claves para solucionar este tema y, más adelante, para organizar el enlace de vuestros sueños sin problema.
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