Luna de miel solidaria: ¡el viaje que cambiará vuestras vidas!
El viaje de novios puede ser un buen momento para dejar aflorar vuestra vena solidaria y pensar en ayudar a los más desfavorecidos. ¡Os contamos cómo hacerlo sin que, por ello, tengáis que renunciar a disfrutar de unos días de descanso y diversión!
Antes de daros el "sí, quiero" tendréis que organizar todos los preparativos de la boda: encontrar el mejor proveedor para el banquete, buscar el vestido de novia que más te favorezca, elegir los detalles de boda más prácticos para todos vuestros seres queridos, dar con unas ideas originales para bodas que estén en consonancia con el estilo del enlace... Pero, ¿y la luna de miel? Tened en cuenta que es el primer viaje como casados, por lo que ha de ser una experiencia irrepetible. ¿Qué os parece si, además de relax y diversión, durante vuestra honeymoon ponéis vuestro granito de arena para contribuir a la creación de un mundo más justo? ¡Cualquier ayuda, por pequeña que sea, será muy bien recibida!
Una luna de miel diferente
Si todavía no habéis decidido el destino de vuestra luna de miel, podéis pensar en un viaje solidario con un voluntariado o cualquier otro gesto altruista que, por pequeño que sea, contribuya a luchar contra la desigualdad y la injusticia. Pero ser solidario no significa que tengáis que renunciar a disfrutar de unos merecidos días de relax. Por eso os traemos algunas ideas que pueden resultar interesantes y que no os impedirán tener un romántico viaje de novios, ayudando al mismo tiempo a quienes más lo necesitan.
Voluntariado generoso
Algunas parejas convierten toda o parte de su luna de miel en un viaje solidario, o bien incluyen algún pequeño gesto altruista para ayudar a los más desfavorecidos. Tenéis mil y una opciones: voluntariados en comunidades rurales de Nepal, proyectos educativos en Guatemala, trabajo comunitario con las tribus de Zimbabue, ayuda de los niños de la calle en India, protección de las comunidades indígenas del Amazonas... Para decidiros solo tenéis que poneros en contacto con la delegación española de las ONG's u organismos internacionales que trabajen en el destino que hayáis elegido o en uno de los que os gustaría conocer. Consultad qué tipo de ayuda humanitaria ofrece cada una y escoged aquella con la que os sintáis más identificados o creáis que podáis ser más útiles. No hace falta que paséis toda la luna de miel ayudando, pero seguro que estar dos o tres días trabajando con ellos será una gran experiencia que nunca olvidaréis.
Donar material básico o de primera necesidad
Otra forma de ayudar es entregando material de primera necesidad. Una vez elegido el destino de vuestra luna de miel, informaros de los proyectos existentes en el país en cuestión y qué tipo de material precisan. La mayoría de las veces es mejor comprar las cosas en el destino, evitando aduanas y ayudando así a la economía local. Las necesidades suelen ser diversas y muy básicas: desde libretas y bolígrafos para las escuelas hasta material deportivo y libros, pasando por pelotas, mochilas, juguetes, ropa, mantas, medicamentos o artículos de higiene personal (gel, champú, pasta de dientes...).
Pequeños gestos que marcan la diferencia
Si queréis que vuestro viaje de novios sea especial, tened en cuenta que con pequeños gestos estaréis poniendo un importante granito de arena para hacer el mundo un poco más justo y solidario. Por ejemplo, una buena manera de ayudar a un país es contribuyendo a su economía. Así que comprad productos de comercio justo que luchan contra la pobreza fomentando salarios dignos, que evitan la explotación laboral infantil, que impulsan la igualdad de sexos en cuanto a retribución, que permiten a los trabajadores vivir con dignidad y que protegen el medio ambiente. Si queréis llevaros algún recuerdo de los lugares que visitéis, compradlos en los mercados artesanales o cooperativas. De esta manera estaréis ayudando directamente a los pequeños comerciantes y artesanos.
Como veis, existen muchas formas de ser solidarios en vuestra luna de miel y algunas de ellas no os supondrán apenas esfuerzo. Mientras soñáis con ese primer viaje de casados, que también os llevará a ayudar a los demás, no os olvidéis de ir ultimando detalles, como enviar las invitaciones de boda a todos vuestros familiares y amigos o hacer un listado con las canciones de boda que más os gustan. ¡Va a ser una experiencia inolvidable para los dos!