Luna de miel en Nepal: en el reino del Himalaya
El bullicio de Katmandú, las impresionantes montañas del Himalaya, la visita obligada a Lumbini, lugar de nacimiento de Buda… Nepal es un destino mágico que os cautivará con su cultura y sus paisajes únicos en el mundo. ¡Una luna de miel inolvidable!
¿Estáis empezando a organizar vuestro enlace? Después de enviar las invitaciones de boda os espera un verdadero maratón de preparativos hasta el día B. ¿Por qué no dejáis de pensar por unos días en los detalles de boda para vuestros familiares y amigos o en esas ideas originales para bodas con los que sorprenderlos y os centráis en el destino de vuestro viaje de novios? Nepal podría ser una excelente opción. Os descubrimos todos los encantos que encierra este mágico país. ¡No os defraudará!
Una bellísima flor de loto
Dice una antigua leyenda que Nepal nació de una bella flor de loto que flotaba sobre un inmenso lago que cubría el valle de Katmandú. Tierra de sherpas, yaks y monasterios budistas, se encuentra en Asia meridional, justo en el Himalaya, limitando al norte con China y al sur con la India. Es un país de contrastes con algunas de las cimas más altas del planeta, como el Everest, y con calurosas llanuras tropicales al sur. Al haber tantas diferencias de altitud podréis disfrutar de un clima tropical, continental o de alta montaña, lo que lo convierte en un destino especialmente atractivo. La mejor época para visitarlo es durante los meses de primavera y otoño.
De visita a Katmandú
Es la capital de Nepal y tiene algo de misterioso y mágico que os atrapará nada más llegar. Allí podréis descubrir infinidad de monasterios paseando por sus estrechas callejuelas. Es imprescindible que os acerquéis a Swayambhu Nath –el templo de los monos–, uno de los lugares más visitados de la ciudad. Os hechizarán sus maravillosas vistas del valle, su estepa blanca y dorada, sus peregrinos rezando mientras giran las ruedas de oración… Y, por supuesto, sus monos, que no dudarán en quitaros la comida en cuanto os descuidéis.
Visitando el valle de Katmandú
No os perdáis Bhaktapur, con sus preciosos templos, pagodas y estanques. Las callejuelas serpenteantes con edificios tradicionales de ladrillo rojo os descubrirán pequeñas plazas que se usan para secar grano y hacer cerámica. La plaza Taumadhi de Bahktapur es una de las más bellas de Nepal. Imprescindible acercarse a la pagoda Nyatapola, con sus nueve pisos, la más alta del país y joya de la arquitectura newari.
Pokhara, junto a un precioso lago
Situada muy cerca de las montañas y junto a un precioso lago, Pokhara es ideal para hacer alguna excursión y visitar las cataratas de Davis. Imprescindible subir al mirador para contemplar el macizo de los Annapurnas y otros picos del Himalaya.
Rumbo a Lumbini
El peregrinaje a Lumbini –Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO– es un viaje iniciático. Se puede visitar el lugar exacto donde nació Siddhartha Gautama, nombre verdadero de Buda, hace 2500 años.
Y además…
Nepal cuenta con más de 100 etnias y tiene una gran riqueza culinaria. No dejéis de probar el dal bhat, la comida nacional: una base de arroz blanco y sopa de lentejas con curri de verduras o carne de pollo o cordero. Ni los momos, empanadillas rellenas de carne. Y no os olvidéis del té con leche y cardamomo, de sus cervezas peculiares, como la Everest o la Gorkha, ni del fortísimo orujo de arroz: raksi.
¿Qué os parece la idea? Si ya tenéis decidido el destino de vuestra luna de miel, centraos en otros asuntos también importantes, como encontrar el ramo de novia de tus sueños o elaborar una playlist con las canciones para bodas que sonarán el día más feliz de vuestras vidas.