Las 11 mejores frases de Marie Curie, la mujer que revolucionó la ciencia
Hoy nos centramos en el trabajo de Marie Curie: doctora, Premio Nobel (en dos ocasiones) y ejemplo para las mujeres.
Cuando hablamos de Marie Curie, quizá lo hagamos de una de las mentes más brillantes de la historia. Fue pionera en el campo de la radioactividad, y sus logros le permitieron ser la primera persona en conseguir dos Premios Nobel en diferentes disciplinas (Física y Química) y la primera mujer en convertirse en profesora en la Universidad de París.
Su ejemplo logró que, a principios del siglo XX, se revalorizara el papel de la mujer no solo en las ciencias, sino en la vida laboral en general. Tristemente, la estrella de Marie Curie se apagó cuando esta contaba 66 años, víctima del radio que guardaba en sus tubos de ensayo. Su final, sin embargo, fue la consecuencia de una vida llena de méritos, creando escuela y encumbrando la figura de la mujer. Hoy nos quedamos con su trabajo y muchas de sus citas célebres que reflejan que todo es posible con un poco de esfuerzo.
1. La mejor vida no es la más larga, sino la más rica en buenas acciones.
2. No hay que temer a nada en la vida, solo tratar de comprender.
3. La vida no merece que uno se preocupe tanto.
4. La vida no es fácil, para ninguno de nosotros. Pero… ¡Qué importa! Hay que perseverar y, sobre todo, tener confianza en uno mismo. Hay que sentirse dotado para realizar alguna cosa y que esa cosa hay que alcanzarla, cueste lo que cueste.
5. En la ciencia hemos de interesarnos por las cosas, no por las personas.
6. Un científico en su laboratorio no es solo un técnico: es también un niño colocado ante fenómenos naturales que le impresionan como un cuento de hadas.”
7. Siento menos curiosidad por la gente y más curiosidad por las ideas.
8. El camino del progreso no es ni rápido ni fácil.
9. Usted no puede esperar construir un mundo mejor sin mejorar a las personas. Cada uno de nosotros debe trabajar para su propia mejora.
10. La humanidad necesita hombres prácticos, que sacar el mayor provecho de su trabajo, y, sin olvidar el interés general, salvaguardar sus propios intereses. Pero la humanidad también necesita soñadores, para quienes el desarrollo de una tarea sea tan cautivante que les resulte imposible dedicar su atención a su propio beneficio.
11. Las mentiras son muy difíciles de matar, pero una mentira que atribuye a un hombre lo que en realidad era el trabajo de una mujer tiene más vidas que un gato.
El cine, la música y el arte en general ha dejado grandes figuras y excepcionales referencias que debemos tener en cuenta. Sin embargo, en otras disciplinas, las mujeres han realizado un trabajo formidable que ha de ser conocido y valorado por todos. Marie Curie es uno de los tótems de nuestro pasado, presente y futuro.
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