Mesa presidencial de boda: ¿quién se sienta?
Estáis en plena organización de las mesas del banquete pero, ¿sabéis quién se va a sentar en la mesa presidencial de boda? Aunque el protocolo establece que sean las parejas y sus padres, hoy en día hay muchas más opciones. Os las explicamos todas.
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Además de hacer la lista de invitados, uno de los aspectos que más suele preocupar a las parejas que están organizando su boda es cómo sentar a los invitados en las mesas del banquete. Y entre ellas se incluye, lógicamente, la mesa presidencial de boda. ¿Tenéis claro cómo será la vuestra? ¿Necesitáis un poco de ayuda extra? No os perdáis estos consejos. Y es que os ayudamos a decidir quién la ocupará y un plus: dónde colocarla para que podáis ver bien a todos los familiares y amigos que os acompañan en una jornada tan especial. ¡Empezamos!
¿Quién se sienta en la mesa presidencial en una boda?
Aunque para muchas parejas decidir quién se sienta en la mesa presidencial puede parecer muy sencillo, lo cierto es que para muchas otras es un gran quebradero de cabeza.
Y es que, según el protocolo, la mesa nupcial deben ocuparla la pareja y sus respectivos padres, que se sentarán alternando hombre y mujer. Así, la novia estará a la derecha del novio y, a su lado, su padre y su madre, respectivamente, mientras que en el caso del novio es al revés: es su madre quien se coloca a su lado y, por último, se sienta el padre. A partir de esta mesa se sitúan las del resto de invitados, quienes se colocarán más cerca o más lejos dependiendo de su grado de proximidad con la pareja.
Aunque son cada vez más las parejas que deciden pasar de las normas establecidas y decidir cómo ha de ser todo lo relacionado con su boda. Por eso es muy habitual ver que en la mesa presidencial de boda se sientan también abuelos, hermanos e, incluso, sobrinos (siempre que no sean demasiado pequeños). Una opción que es bastante frecuente cuando falta alguno de los padres.
¿Más propuestas sobre quién va en la mesa presidencial de una boda? Entre las distintas opciones actuales, destacar que también hay parejas que deciden sentar en las mesas presidenciales a sus tíos o a personas que son muy importantes para ellos y que quieren tener cerca el día del enlace.
Asimismo, marca tendencia hoy en día la idea de compartir la mesa presidencial de boda con los amigos más íntimos o los hermanos en lugar de con los padres, que se sientan con familiares cercanos. No solo resulta una elección muy amena, sino que en muchos casos puede ser la solución perfecta cuando algunos de los padres están separados y existen desavenencias entre ellos. De esta manera se evitan posibles tensiones y todo el mundo se siente más cómodo para disfrutar del gran día como la ocasión merece.
¿Más ideas sobre la mesa presidencial de boda? Sí, por supuesto. Hay parejas que por motivos familiares diversos o porque prefieren algo de intimidad en una celebración tan "suya", deciden sentarse ellos ellos. Una práctica bastante habitual en una mesa presidencial de boda cuando hay padres divorciados.
- Descubrid mucho más: Mesa presidencial solo para dos. ¿Habíais pensado en esta posibilidad para el gran día?
Pero aún hay otra posibilidad. Y es la de prescindir por completo de la mesa presidencial de boda. Y es que, como os detallamos al hablar de las tendencias de bodas 2024, se llevan las bodas íntimas, personalizadas y libres de compromisos y tradiciones. Unas bodas sin plan de asientos fijos, en las que familiares y amigos podrán sentarse donde quieran. Bodas en las que priman las grandes mesas rectangulares, en las que las parejas que se casan comparten el espacio con sus seres queridos. Así, en muchas bodas de 2024, el seating plan y el sitting ya no son imprescindibles.
Mesa presidencial de boda: distintos tipos
La elección de una u otra dependerá fundamentalmente del espacio disponible y de la interacción que queráis tener con el resto de invitados. Así, las mesas presidenciales de boda pueden ser de dos tipos: rectangulares o circulares. En cualquier caso, elijáis la que elijáis, la mesa debe ser visible desde todo el salón del banquete.
- Las mesas rectangulares son perfectas para colocar en un lateral del espacio de celebración y, en función de su tamaño, pueden albergar un número variable de comensales. Además, resultan muy cómodas para ver lo que está pasando en el resto del escenario nupcial, aunque limitan la conversación a la persona que tengáis sentada a vuestro lado.
- Las mesas redondas, por su parte, se sitúan en el centro de la sala y, por lo general, tienen capacidad para unos doce comensales como máximo. Son ideales para charlar con las personas que queráis sentar con vosotros y os permiten tener al resto de invitados más cerca.
Así que ya lo veis, no existen límites, por lo que podéis hacer lo que realmente queráis o lo que os dicten vuestros sentimientos a la hora de decidir a quién sentar en la mesa presidencial de boda. ¡Vosotros decidís!
Algunos aspectos prácticos que os pueden resultar muy útiles: