La boda de Paloma y Juan Alberto: la fórmula perfecta entre amor y diversión
Risas, abrazos, complicidad... Una boda llena de encanto que enamoró a todos los invitados. Descubre este increíble enlace sevillano, donde la prioridad de los novios fue disfrutar de momentos únicos e inolvidables con sus seres queridos.
¿Quién les iba a decir que esa persona que conocieron mientras salían de fiesta por el centro de Sevilla terminaría siendo el amor de su vida? Desde ese momento, hace 10 años, Paloma y Juan Alberto han vivido muchísimas experiencias juntos que les han permitido crecer como pareja y conocerse cada día más. Todas estas vivencias les llevaron paso a paso hacia el altar, donde se prometieron amor eterno ante la mirada de sus seres queridos.
Una pedida con vistas a la Torre Eiffel
Todo empezó el día que Paloma cumplió años. Juan Alberto tenía el regalo perfecto: un fin de semana romántico en la preciosa capital de Francia. Pero no era un presente inocente. Estaba decidido. Allí sería donde le pediría que pasará el resto de su vida con él. Hubo diferentes obstáculos durante el viaje que casi hicieron que se descubriera la increíble sorpresa. Pero, por suerte, no fue así y llegó la noche. Tenían reservada una mesa en la planta 59 de la Torre Montparnasse, frente a la Torre Eiffel, con unas vistas espectaculares de la ciudad. Ese fue el lugar elegido para dar el gran paso. Juan Alberto se arrodilló delante de ella y le pidió matrimonio, y Paloma, sin pensarlo, asintió y le dio un espectacular beso mientras el restaurante se inundaba con los aplausos del resto de clientes. Una hermosa pedida con las luces de la nostálgica París de fondo. El lugar y el momento idóneos.
La fórmula perfecta
La boda fue a finales de octubre de 2017, el 23 para ser exactos, un día después de que Paloma y Juan Alberto cumplieran 10 años y 9 meses desde que empezaron su bella relación. La ceremonia se celebró en la acogedora Basílica de Jesús del Gran Poder, de Sevilla. Un sitio muy especial, ya que fue donde se casaron los padres de ella. Cuando terminó, les recibieron en la puerta todos los asistentes con una magnífica lluvia de arroz y confeti para celebrar la nueva unión.
A continuación los invitados se dirigieron al Cortijo El Chamorro, un precioso cortijo sevillano que había sido decorado previamente por el Catering Las Torres con mesas altas, bajas, manteles de lino gris y centros de mesa champanera con flores de tonalidades moradas. Además, situaron una furgoneta food truck con cervezas en la recepción, creando así el inicio perfecto de un increíble banquete. Durante toda la cena hubo risas y momentos llenos de ternura. Sin duda, la fórmula perfecta para convertirse en un día único e inolvidable.
Los looks perfectos
Para el gran día, Paloma se decantó por un elegante vestido de novia de la firma Franc Sarabia. A conjunto, unos bonitos zapatos de Giko. Y para dar el toque de color, un original tocado a conjunto con los pendientes personalizados de Ignacio Franco Joyeros. Cada uno de estos elementos contribuyó a crear un look que hacía deslumbrar su belleza natural. Por último, y gracias a Cartamo Flores, completó el outfit nupcial con un delicado ramo de novia en el que las protagonistas eran unas bellas rosas blancas.
Juan Alberto, en cambio, se decidió por un sofisticado chaqué azul y una camisa a medida de Ana Valencia, que encajaba a la perfección con el chaleco príncipe de Gales. Los complementos fueron unos sutiles gemelos de la firma Lista y unos zapatos de Calce.
Diversión y complicidad
Fue un enlace donde, por encima de todo, los novios priorizaron divertirse con sus seres queridos y compartir con ellos un día mágico y lleno de emociones. Cada uno de los magníficos instantes vividos fue captado por el equipo profesional de Rosseblanc. Disfrutad de las hermosas fotografías y dejad que os transmitan todas sus buenas vibraciones.