La boda de Gerard y Miriam: un amor nacido en Irlanda
La bella Irlanda fue el lugar en el que Gerard y Miriam coincidieron y, sin buscarlo, encontraron el verdadero amor. Tras varios años de idílica relación, la pareja se fundió en un "sí, quiero" rústico chic en Segovia.
El país del novio, la bella Irlanda, se convirtió en el escenario que vio nacer el amor entre Gerard y Marina. Irlandés y madrileña, ambos jóvenes se conocieron y, sin apenas buscarlo, nació entre ambos una complicidad única. De ese idílico romance, y tras algunos años como pareja, llegó el momento de la pedida... Un paso al frente en su relación que les llevó a forjar de forma definitiva su intensa historia de amor.
Un "sí, quiero" de estilo rústico chic
La imponente ciudad de Segovia, fue el escenario que acogió el gran día de esta pareja de enamorados.
Dividiendo su enlace en ceremonia y festín, Gerard y Marina apostaron por la Iglesia de Nuestra Señora de la Cerca para darse el "sí, quiero" y, del mismo modo, la Finca Lasmargas resultó la elegida para la celebración del banquete nupcial y la fiesta posterior.
Sacando partido al exuberante paisaje natural de la finca –que cuenta con un total de 30 hectáreas– y al encanto natural de su fachada –con la esencia de un antiguo caserío–, los novios decidieron cubrir su escenario nupcial de un estilo rústico chic impecable. Así, y bajo una decoración muy cuidada, en la que destacaron los acabados en madera y las flores en tonalidades nude y verdes, junto con el blanco y los rosas palo como colores predominantes, el mágico escenario natural de la pareja se envolvió de una esencia personalizada y romántica, acompañada siempre por el tan característico estilo campestre.
Románticos looks nupciales
Ambos novios lucieron radiantes en su esperado día B. Por un lado, el novio eligió un traje clásico en azul intenso, camisa blanca y corbata azul cielo.
Por su parte, Marina se decidió por el espectacular modelo Saboya, de Rosa Clará. Un vestido de corte recto y escote barco, con algo de cola, que dejaba su espalda al descubierto con una romántica apertura trabajada con preciosos brocados: los mismos que cubrían sus hombros y la cintura. En cuanto al peinado, se decantó por un recogido bajo y desenfadado. Unas joyas familiares y un bonito bouquet de estilo romántico completaron su look nupcial.
Un día lleno de emociones
Gerard y Marina apostaron por un enlace al aire libre, pues el objetivo principal que se plantearon cumplir para su "sí, quiero" era conseguir que los invitados disfrutaran con la celebración de una boda especial y poco común en países como Irlanda. Así, y en un entorno natural perfecto, la pareja vivió uno de los días más emocionantes de sus vidas.
De todo ello se hizo eco el equipo de Alma Fotografía, que tuvo el placer de conocer a esta pareja de enamorados y de plasmar en un cuidado trabajo fotográfico el amor y la felicidad de la forma más nítida –así como organizar algunos servicios fotográficos extra, como es el magnífico photocall que dejó impresionados a novios e invitados–.
¡No perdáis detalle del mágico día de Gerard y Marina!
