La boda de Fran y María: una love story llena de románticos secretos
Fran y María demuestran que encontrar el amor a través de internet es posible. Su historia comenzó en 2002 en la red y, después de ello, no quisieron vivir el uno sin el otro. Tras 14 años de noviazgo, ¡Fran y María se daban el "sí, quiero"!
Fran y María son un claro ejemplo de que encontrar el amor a través de internet es posible. El inicio de su historia comienza en 2002, en un momento en el que quizá encontrar pareja a través de la red no era, todavía, muy usual. No obstante, ambos jóvenes decidieron seguir con su bonita y curiosa historia de amor. Conociéndose cada día un poco más, acabaron descubriendo que –a pesar de estar separados por pantallas de ordenador– entre ambos existía una complicidad muy especial.
Y por aquel entonces, tan diferente como fue su forma de conocerse, también lo fue su encuentro y su posterior romance. Tras más de 14 años de noviazgo –e incluso habiendo mantenido su relación en secreto durante un tiempo–, Fran y María ¡decidían casarse! Queriéndose como el primer día, el joven fue quien consideró que era el momento idóneo para dar el gran paso... Y, realmente, su pedida fue igual de mágica y especial como lo fue toda su relación.
Una pedida llena de sorpresas
Durante un viaje que la pareja realizó a Tailandia, Fran organizó la romántica pedida. Inspirándose en la pasión de su chica por los muñequitos que se encuentran en el interior de los huevos Kinder Sorpresa, Fran no lo pensó dos veces. ¿Cómo pidió matrimonio al amor de su vida? Incluyendo dentro de uno de esos huevos un muñequito hecho con una impresora 3D, que imitaba la posición de un chico arrodillado pidiendo matrimonio.
Un sinfín de emociones y sentimientos inexplicables brotaron a flor de piel... ¡María no podía creerlo! Ese momento marcaba un antes y un después en su relación: ambos enamorados ponían fecha a su "sí, quiero".
En un entorno plenamente valenciano
La pareja escogió el Huerto de Montesinos para la celebración de su enlace. Así, en una maravillosa villa en medio de campos de naranjos a tan solo 15 minutos de Valencia, Fran y María celebraron su amor en compañía de sus más queridos ¡por todo lo alto!
Alejándose de convencionalismos, Fran y María optaron por un enlace al aire libre, de estilo vintage y con ciertos toques de informalidad. De esta forma, la ceremonia se vivió en la entrada de la masía y, acto seguido, recién casados e invitados pasaron dentro del establecimiento para deleitarse con un cóctel exquisito. Para ello, los novios decidieron poner varias barras libres en círculo con una gran variedad de embutidos, panes y cervezas importadas de varias partes del mundo. Todo ello al son de la excelencia de la música dixie.
Para el banquete, los novios apostaron por poner mesas rectangulares. La pareja intentó estar en todo momento con sus invitados. Para ello, reservaron sitios en los que solo podían sentarse invitados "imaginarios". Efectivamente, esos invitados eran los propios recién casados, que compartieron ratos del banquete sentados al lado de sus más queridos.
Los estilos vintage y handmade estuvieron presentes en todo momento. Destacaron un sinfín de detalles; desde las invitaciones –que fueron tabletas de chocolate artesanal con un envoltorio diseñado por los propios novios–, hasta los pai pais, los conos para los pétalos de rosa, una fantástica mesa de vermú, la coctelería –que los novios bautizaron como "La Coctelería de Fran y María"–, el seating plan, el photocall, el carrito del candy bar, la cartelería nupcial, la decoración floral... Absolutamente todo lo construyeron los novios. ¿El resultado? Una decoración delicada, personalizada y ¡fantástica! Y el cariño con el que lo hicieron los novios se vio reflejado en cada rincón.
Lo que más gustó, sin duda, fue la declaración que los novios hicieron en su boda. Si había alguien que no conocía el inicio de su historia de amor, ¡los novios se encargaron de que la conocieran! A través una Love Story, los novios plasmaron el transcurso de su bonita relación. ¡Pura magia!
¡Guapísimos!
Ambos novios lucieron radiantes en su "sí, quiero".
Fran escogió un traje azul marino, chaleco, camisa blanca y zapatos marrones. Destacó su pajarita, pues la elaboraron de madera y el centro iba a juego con el pañuelo del propio traje. Por su parte, María brilló con luz propia con un fantástico vestido de los años 50 por la rodilla, guantes de rejilla y un tocado ladeado como peinado.
Magnífico día
El equipo fotográfico de Estudio Tandem fue el encargado de fotografiar la esencia de un día único. El reportaje nupcial de Fran y María refleja la felicidad vivida durante su "sí, quiero"... Un momento inolvidable del que no debéis perder detalle. ¡Enamoraos de esta boda llena de magia!