La boda de Alejandra y Andrés: el amor más puro y boho chic

Tras una relación de varios años y sintiendo el mismo amor del primer día, no podía ser de otra manera: Alejandra y Andrés se dieron el "sí, quiero" en una ciudad mágica, Sevilla, y en una boda única repleta de detalles.

En el gran día, la pareja se despertó en el Hotel Sacristía de Santa Ana, en Sevilla, lugar que acogería los primeros preparativos, así como un sinfín de nervios y emociones por parte de ambos. La Casa El Loreto, una atípica casa de campo situada en el Aljarafe sevillano, fue el lugar que Alejandra y Andrés eligieron para celebrar la deseada boda. En un romántico escenario natural, el jardín de la finca, la pareja dio el gran paso. Acto seguido, el Catering Campuzano tenía preparado un menú de infarto que acompañaría a novios e invitados hasta el final de un día inolvidable.

El beige, el morado, el marrón, el blanco y, en contraste, el granate, se convirtieron en los protagonistas indiscutibles tanto de la ceremonia como del banquete. Por otro lado, un ambiente alegre y festivo y la perfecta combinación del vintage, el hippy y el romántico, dieron como resultado un estilo boho chic impecable, que se reflejó en cada rincón de la celebración gracias a la personalidad de los novios y a la ayuda incalculable de Y comieron perdices. La ornamentación floral destacó como otro imprescindible de la decoración. Flores clásicas como las peonías o las rosas, en combinación con otras silvestres como la lavanda, conformaron una decoración floral inigualable gracias a Melero Floristas. En ese mismo juego de flores y con una mezcla de blancos, verdes y granates, el ramo de la novia se convirtió en el gran aclamado del día por la belleza de su aspecto y un efecto cascada sin igual. La delicadeza artesanal de La Emperatriz logró crear un ambiente lleno de calidez y romanticismo gracias a unos elementos decorativos únicos –elaborados en madera, acero envejecido, porcelana y cristal– y al diseño de una papelería nupcial personal y de un estilo boho chic plenamente acertado. Durante el cóctel, La Cecería Decor consiguió una decoración íntima y veraniega con una gran multitud de luces y velas, seguidas de las dulce melodía de PimPam Music.

El look de ambos –como no podía ser menos– siguió esa línea boho chic tan característica del enlace. Ella lució un precioso vestido de Immaclé Novias –modelo Estella– y dos pares de zapatos: el primer par, de brocado en ante, lo utilizó para las fotografías en el hotel y el segundo, de esparto blanco personalizado por una amiga, lo llevó durante el resto del día. Una preciosa corona y el ramo –del que hemos hablado con anterioridad–, elaborados con peonías, eucalipto y falsa pimienta por Melero Floristas, pusieron el broche de oro a un vestuario boho de novia brillante. Respecto al peinado, Alejandra apostó por la naturalidad y sencillez dejando su melena suelta con la ayuda de Top Image. Igual de natural fue el maquillaje gracias a The Beauty-Full Corner, encargados también de ir retocando a Alejandra durante las largas horas de celebración. Asimismo, Andrés apostó por un espectacular traje Caramelo en tonos azul marino y, en contraste, una pajarita y un prendido en tonalidades granates.

Sin duda, la boda de Andrés y Alejandra se convirtió en un acontecimiento absolutamente especial e inolvidable. Un día único del que el equipo fotográfico de El Creador de Recuerdos no quiso perder detalle... Detalles que hoy os mostramos gracias a unas increíbles capturas. ¡Disfrutad de esta preciosa boda!