30 ideas para una boda en rojo y blanco
Pasión y pureza; la combinación blanco y rojo, en equilibrio, resulta una excelente mezcla para una decoración romántica, vivaz y armónica a su vez. Dejad que estos colores sean la apuesta perfecta en cada detalle de vuestra boda con estas 30 ideas.
Son muchos los novios que prefieren no arriesgar en su esperado día y evitar incluir tonalidades con gran fuerza en la decoración de su boda, como por ejemplo el rojo. No obstante, precisamente el color de la pasión es un gran acierto para incluir en celebraciones tan románticas y sentidas –desde en las invitaciones de boda hasta en el más mínimo detalle de la decoración nupcial–. Sobre todo en la actualidad, donde las nuevas ideas de decoración para bodas han acogido los tonos llamativos como los indiscutibles y grandes protagonistas del escenario. Por ello, en las bodas de hoy en día, el rojo, acompañado siempre por colores neutros como el blanco o el beige –los colores por excelencia de los vestidos de novia y de los ramos de novia más románticos y tradicionales–, está ganando un importante protagonismo; su exquisita belleza y la perfecta mezcla que conforma el rojo junto a los tonos neutros, hacen que el color aporte un equilibrio cromático absolutamente excepcional e ideal en celebraciones de cualquier estilo –ya sean rústicas, vintage, románticas, boho chic o urbanas, por ejemplo–.
Asimismo, el color del pasión se presenta como una apuesta muy atractiva, pues trae consigo una fuerte pigmentación y contrastes muy llamativos –aunque a veces necesarios–. Siempre frente a las tonalidades nude como acompañantes, cualquiera detalle nupcial –desde los tan solicitados trajes de novio originales, pasando por unos ramos de novia sencillos y compuestos por rosas rojas e, incluso, por unas tartas nupciales únicas y llamativas–, permitirán un juego de colores únicos por estar envueltos en la cálida y especial tonalidad que caracteriza al rojizo. Para vosotros, novios, cuidados detalles en rojo en vuestro atuendo romperán el look nupcial más clásico por completo. Los complementos –tales como los clásicos tocados de novia–, el maquillaje o el ramo de novia, así como el prendido del novio, serán los detalles que mejor acogerán esta tonalidad. Del mismo modo lo harán también el look de las invitadas; vestidos de madrina –por ejemplo– de corte imperio en tonalidades rojizas para ellas, y un conjunto en rojo y blanco para los más pequeños –tanto para pajes como para damitas–, mostrarán una corte nupcial llena de vida, elegancia y personalidad.
La papelería de la boda, por su parte, así como el espacio de celebración en el que la queráis llevar a cabo vuestro día, los detalles de la decoración nupcial –las flores, los asientos, las mesas del banquete o el seating plan, por citar algunos ejemplos–, los regalos de boda con los que obsequiéis a vuestros invitados o todas esas ideas originales para bodas que se han proclamado como el gran must de cualquier romántico enlace –como los rincones del photocall–, tendrán un acabado llamativo y perfecto si aportáis estos pequeños e indispensables toques de color rojo –siempre bajo un fondo blanco suave, como decíamos–. De este modo, conseguiréis un efecto nada recargado, un espacio iluminado y un toque vibrante y absolutamente atractivo en toda la decoración de vuestro día B.