Hablemos claro de la Alta Costura (por Jordi Anguera)
Soy un diseñador y modisto de vestidos de novia y fiesta y empiezo a estar un poco harto de la ligereza con la que algunos diseñadores y empresas de confección emplean la palabra costura o alta costura.
*Artículo cedido por Jordi Anguera, Disñador y Modisto de vestidos de novia.
Llevo 20 años en el sector y de siempre la palabra costura es sinónimo de personalidad, hecho a mano, a medida, de una manera totalmente artesanal y personalizada, con tejidos nobles y exclusivos. Sin olvidar el trato que debe dársele al cliente, un trato personalizado del creador o diseñador. Esto implica que cualquier penda confeccionada de esta manera, sea más cara que una prenda de confección.
Una prenda de costura o alta costura conlleva una serie de pruebas, por lo menos cuatro, y la clienta ve y vive todo el proceso de confección del vestido, pudiendo en cada prueba hacer pequeños cambios y ajustando el vestido cada vez.
Desde hace unos años, varias firmas de prêt-à-porter utilizan a la ligereza este adjetivo con unos precios increíblemente bajos, causando una gran confusión en el cliente final. ¡Que se enteren de una vez que todo no es costura, que comprar un vestido de novia de costura, hacer una prueba y verlo acabado, no es costura! ¡Es un vestido adaptado! Posiblemente confeccionado en serie, en otro país. Así es como trabajan la mayoría de firmas que acaban poniendo el adjetivo costura a sus vestidos.
Qué atrevimiento tiene el diseñador de confección que haciendo una colección de vestidos de costura con acabados a mano por menos de mil euros. ¡Eso no se lo tiene que creer nadie! Estas firmas enseñan un catálogo y la palabra costura está reñida con los catálogos; ¿qué personalización es esa?
Hablemos claro, tengamos un respeto a la palabra costura y respetemos a los artesanos que hacemos de esto un arte.