Esencias florales
El conocimiento de los poderes curativos de las plantas se remonta a la antigüedad, donde por intuición se comenzaron a emplear en la medicina aquellos remedios que nos ofrecía la madre tierra.
Durante muchos años y generación tras generación se han empleado remedios sencillos y fáciles de utilizar para aliviar síntomas y soliviantar dolencias mediante la curación natural. Pero los avances y conocimientos en el campo de la medicina dejaron en un segundo plano el modo de curar ciertas enfermedades por medios naturales, tendiendo de esta manera a un abuso desconsiderado de fármacos.
Lo mismo ocurrió en el mundo de la cosmética; a mediados del siglo XX se descubrieron grandes avances químicos, físicos y tecnológicos que hicieron que la sociedad aparcase aquellos remedios caseros para el cuidado de la piel, substituyéndolos por productos con derivados de aceites minerales, sustancias de síntesis y conservantes químicos que dan una mayor duración al producto final y un aspecto mucho más atractivo.
A comienzos del siglo XXI, sin embargo, se inició un retorno a la cosmética formulada con recetas de antaño. Ya sea debido a la conciencia social ante el cambio clímatico o a una mera moda pasajera, el incremento de nuevas firmas cosméticas biológicas y el mayor número de consumidores de éstas es más que obvio.
Existen guías para conocer en profundidad el alma de lo más puro de cada planta y cómo cada una actua no solo a nivel tópico, sino de un modo emocional, capaces de contrarestar emociones negativas. Nos referimos concretamente a las esencias florales creadas por el Dr. Eduard Bach.
Todas las esencias florales tienen efectos psicológicos, ya que tratan al paciente y no la enfermedad. Por su parte, tienen un gran poder terapeútico de uso tópico que las hace idoneas en afecciones leves de la piel. A continuación, citaremos unas cuantas esencias florales, quizá de las más desconocidas, pero que nos pueden resultar muy curiosas.
Milenrama
Puede emplearse sobre la piel para tratar eccemas, grietas, piel seca, así como para detener hemorragias. Los franceses la llamaban "la hierba del carpintero" ya que era capaz de curar las heridas provocadas por las herramientas que empleaban. Una decoción de Milenrama con hinojo y tila alivia los dolores causados por el sindrome premenstrual y puede ayudar a calmar los nervios de la boca del estómago, tan habituales entre las novias.
Caléndula
Alivia el picor y mejora visiblemente las pieles más sensibles y reactivas (piel atópica, eccemas, psoriasis…). En infusión es perfecta para los problemas gastrointestinales y además cicatriza las ulceras del estómago.
Manzanilla
Conocida por aliviar los trastornos estomacales, también alivia los dolores mentruales , calma los nervios, contribuye a aliviar la tensión, la ansiedad, temores y favorecer un sueño reparador. A nivel epidérmico mejora increíblemente las pieles sensibles. Una curiosidad: es capaz de reavivar a una planta que se encuentre en mal estado, si se planta una manzanilla a su lado… De ahí que se la llame “el médico de las plantas”.
Hipérico o hierba de San Juan
Actualmente se emplea para combatir la ansiedad, la depresión, la apataia y el insomnio entre otros síntomas. Aplicado en la piel, es un buen cicatrizante gracias a su riqueza en taninos. También es perfecto en los tratamientos antiacné, por su virtud antiseptica y astringente.
Olivo
Producto muy valioso y que a menudo pasa inadvertido, la esencia del olivo es idónea para combatir el cansancio de la vida diaria. Aplicada en un masaje ayuda a tener un descanso reparador ya que mejora la circulación sanguínea y elimina toxinas. Ingerida es perfecta para afrontar un examen o prueba física o intelectual ya que ayuda a superar la fatiga y el agotamiento. Otra esencia que puede ayudar en estos casos es el Castaño blanco.
Mostaza
Para acabar, una mención especial a una especia conocida por su uso culinario pero cuyas propiedades curativas son habitualmente empleadas en la medicina tradicional de la India. La esencia floral de la mostza ayuda a mitigar el insomnio, las cefaleas y los sentimientos negativos. La medicina ayurvédica la utiliza para purificar y eliminar tensiones internas.