Cosas que estresan y cómo combatirlas
Que casarse es un gran paso y un momento de gran felicidad en la vida de toda persona lo sabemos bien. Pero que toda esa felicidad conlleva también un gran estrés no hay quien lo dude, por eso Ricky nos da unos consejos sobre cómo manejarlo.
A mí el estrés me activa y me ayuda a cumplir mis objetivos. Pero entiendo a la gente que no quiere ni oír hablar de él. Y especialmente cuando nos referimos a una boda. Bien, pues ahí os van unos consejos para que no se os vaya la olla (y la salud) planificando vuestra boda.
Contratad un wedding planner
Si os lo podeis permitir, merece la pena y no os arrepentiréis. Los hay buenos, bonitos y baratos. Ayudan, os ahorran un montón de dolores de cabeza y, en definitiva, velan para que en el día de vuestra boda os lo paséis en grande y, ante todo, estéis tranquilos.
Rigor presupuestario
Saber exactamente la cantidad de dinero que os podéis gastar tranquiliza mucho. Es preciso, pues, que tengáis una conversación lo más honesta posible entre vosotros y con vuestros padres para saber a ciencia cierta con qué contáis y cómo lo distribuís. Pensad que siempre hay gastos inesperados, por lo que es interesante reservar algo de dinero para afrontarlos. ¡Y utilizad nuestro presupuestador para tenerlo todo bajo control!
Conteo de invitados
Tratad de ser lo más precisos y organizados posible con ello. La web de novios que podeis hacer en Bodas.net es la mejor opción para tener controlado en todo momento quién confirma su asistencia y quién no. ¡Haced vuestra web e invitad a vuestros invitados a que participen! No solo pueden confirmar su asistencia, también pueden haceros alguna observación sobre alergias alimentarias, por ejemplo.
Cuidado con el handmade
Se llevan los DIY porque las cosas a mano quedan muy monas y, sobre todo, son baratas. Pero cuidado porque también os restarán un montón de tiempo que necesitaréis para atender otros asuntos o, simplemente, para descansar.
Dejaos aconsejar
Bodas.net es un excelente portal donde daréis con los mejores profesionales en todos los campos. Escuchad las opiniones de otras parejas como vosotros para elegir los mejores proveedores para vuestra boda.
Finalmente. Si llega un punto en que los preparativos os están sobrepasando y empezáis a discutir, daos un respiro y pensad en la máxima de todas las máximas: “Una boda es la celebración de vuestro amor. Nada menos que eso. Pero tampoco nada más”.