Consejos para lucir el ramo de novia

No estamos acostumbradas a llevar un ramo de flores, así que es normal que el día B nos sintamos un poco raras con el ramo de novia en la mano. Lo malo es que esa extrañeza la tenemos sobre todo al principio, cuando más fotos nos harán y más miradas se posarán sobre nosotras. Y es en esos momentos cuando pensamos ¿qué hago con el ramo?, ¿cómo lo cojo? Tranquila, aquí tienes unos sencillos consejos que te ayudarán a manejarte con él:

• Si se trata de un bouquet, cógelo con el índice y el pulgar lo más arriba que puedas, y apoya ahí el peso de las flores. El resto de dedos irán a continuación cerrados pero sin estar apretados. Nunca lo cojas por el medio del tallo ni por el final, ni con las dos manos, a menos que sea para posar por un momento en una foto. En ese caso recuerda que tampoco debes coger el ramo como si lo estrangularas. Ha de ser algo suave, con las manos relajadas.

• Si el ramo es tipo vara, la parte de las flores deberá ir apoyada en tu antebrazo y el tallo sobre tu mano semi abierta boca arriba, tanto si estás caminando como si estás sentada. Este tipo de ramo sólo puede cogerse con una mano, la derecha, y de esta forma. Aún así, durante el reportaje puedes cogerlo con las dos manos, por ejemplo, para alguna foto en concreto.

• El mejor lugar para llevar el ramo es a un lado, a la altura de la cadera, con las flores mirando hacia adelante siempre. Imagina que estás dibujando un triángulo con él y tu cuerpo, dejando el codo algo flexionado pero relajado.

• Para entrar en la ceremonia y puesto que según el protocolo tu padre o la persona que te acompañe al altar irá a tu derecha, deberás llevar el ramo en la mano izquierda. Al salir sin embargo deberás cogerlo con la derecha ya que el novio estará a tu izquierda.

• Mientras firmas los papeles, el ramo debe quedarse apoyado sobre el altar con las flores mirando hacia los invitados y el tallo mirando hacia ti pero sin taparte.
• Durante las fotos, intenta que la mano con la que lleves el ramo te permita tener la otra libre para cogerte o colocarte el vestido o el velo. Al pasear o moverte no dejes que el ramo vaya caído, totalmente boca abajo con las flores mirando hacia el suelo. 

• Si te ves un poco insegura, practica delante del espejo en casa con un ramo cualquiera que te compres o hagas tu misma con flores del campo o de tu jardín.
• Lo que nunca, nunca falla es la seguridad en ti misma, y eso se transmite a través de tu postura, tu mirada y tu sonrisa. No las pierdas y habrás ganado.