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Bodas

Así ha sido la 'microwedding' de Laura y Jonatan

El sábado 20 de junio ha sido el gran día de Laura y Jonatan quienes, pese a contar con un plan B, finalmente han podido celebrar su boda en la fecha que habían previsto tras su compromiso. ¡Ni el coronavirus puede frenar su amor!

Alcolor Fotografía y Video

Pese a que con la llegada de la fase 2 de la desescalada ya era posible celebrar bodas en muchos municipios y ciudades de España, la fase 3 permitía mayor margen de actuación. Es decir, mayores aforos tanto durante la ceremonia como durante la celebración. Es por eso que, muchos de los enlaces previstos para esas fechas, siguieron adelante. Es el caso de la boda de Laura y Jonatan quienes, tras comprometerse, decidieron casarse el 20 de junio de este año en la provincia de Tarragona. Una fecha que finalmente pudieron mantener. ¡La COVID-19 no ha frenado sus planes nupciales!

Los protagonistas de esta historia nos cuentan cómo han vivido estos meses y cómo ha sido uno de los días más felices de sus vidas cuando, por fin, han reunido a todos los familiares y amigos a los que enviaron sus invitaciones de boda y cuando han sonado de fondo las diferentes canciones de boda elegidas. "Toda esta situación debido al coronavirus empezó en marzo y yo tenía en la cabeza que cuando llegara mayo o principios de junio ya habría pasado –comenta Laura–. Pero conforme se acercaba la fecha lo veíamos cada vez más mal. Sin embargo, cuando la situación empezó a remitir en Europa, vimos por fin la luz". Pese a todo, ambos han sido muy optimistas en todo momento. "Nos dijimos que seguiríamos hasta el último día y que si, finalmente no podíamos celebrar la boda en la fecha prevista, tendríamos que esperar. De hecho, nunca nos planteamos aplazar ni cancelar", afirman.

Un optimismo que han mantenido en parte gracias al restaurante elegido para celebrar su boda y que ha sido también el lugar donde se han dado el esperado "sí, quiero" tras un año y medio de preparativos, El Maset Restaurant & Events. "Cuando empezó la crisis sanitaria por la COVID-19 nos pusimos en contacto con ellos y, la verdad, es que nos ofrecieron una visión súper optimista", explican. No fue hasta la segunda llamada, hace aproximadamente un mes, cuando planteamos la opción de buscar un plan B. "Acordamos el 25 de julio, pero finalmente no será necesario. Hemos preferido casarnos en la fecha original porque era "nuestra" fecha. La otra era alternativa", comentan contentos.

Máximas facilidades por parte de los proveedores

Tanto Laura como Jonatan se muestran muy contentos con el trato recibido por parte de sus proveedores. Incluso cuando decidieron buscar una nueva fecha. "Coincidió que tanto el restaurante como el fotógrafo profesional, Alcolor Fotografía y Vídeo, tenían la fecha libre, así que fue todo súper fácil", afirman. Jonatan se muestra asimismo muy agradecido con el proveedor de su traje de novio, ya que además de que le trataron muy bien le explicaron qué medidas habían empleado para desinfectarlo, siguiendo los actuales protocolos de higiene. También les ha puesto facilidades Anna Abellà Floristes, la empresa de flores contratada.

Una boda sin apenas modificaciones

El hecho de haber mantenido su fecha de boda inicial no ha supuesto grandes cambios en los planes de esta pareja tarraconense. El principal quizá ha sido el cambio de destino para su luna de miel. Pero fieles a su espíritu positivo, ya han encontrado una solución, tal y como nos comentan: "teníamos previsto ir a Nueva York, pero hace unas semanas nos comunicaron que se había aplazado el viaje. Así que hemos decidido que, si todo va bien, iremos el año que viene. Mientras, hemos contratado un viaje a Atenas para celebrar nuestra boda". Todo un cambio en positivo para esta pareja que, hasta hace unas semanas, no sabía si podría celebrar su boda y ahora hasta se plantea poder ir de luna de miel, aunque sea cerca de casa.

En cuanto a los invitados, no han tenido que reducir su lista inicial, aunque esta sí ha disminuido. "No hemos tenido que recortar invitados, pero las personas de alto riesgo han preferido no asistir por recomendación médica", nos cuentan. El resto, 60 personas ­– casi todos familia o amigos cercanos–, han celebrado al lado de Laura y Jonatan su mágica cita nupcial. Y para los que no han podido estar con ellos, "hemos contratado un servicio de fotografía y vídeo, así que ya quedaremos más adelante con ellos para verlo juntos". ¡Su optimismo puede con todo!

Todas las medidas de seguridad necesarias

Laura y Jonatan tienen muy claro que la seguridad es esencial ahora mismo. Por eso han adoptado todas las medidas para garantizarla en su boda. "El restaurante se ha encargado de poner gel hidroalcohólico en los baños y demás puntos obligatorios". Pero no solo eso. Y es que también se han guardado las debidas distancias de seguridad tanto durante la ceremonia como a lo largo del banquete, que se han celebrado indistintamente al aire libre, en los magníficos jardines del restaurante. También la fiesta ha tenido lugar en el exterior. "Había suficiente espacio para que quien quisiera bailar, bailara y quien se quiera apartar, se apartese. Pero evitando las aglomeraciones en la barra en todo momento", afirma Laura.

Animan a todas las parejas a ser positivos

Pese a todas las dudas e inquietudes generadas a raíz de la COVID-19, Laura y Jonatan quieren lanzar un mensaje de optimismo e ilusión a todas las parejas que tienen previsto celebrar su enlace en breve. “Que se animen, que sean positivos y que tiren adelante”. Ellos lo tienen claro. Por eso han seguido con todos sus planes nupciales y por eso se muestran satisfechos del gran paso que acaban de dar. Porque el amor no lo frena nada ni nadie. Porque la esperanza es lo último que se pierde. Y estos enamorados lo han demostrado en todo momento. “Esperamos que nuestro ejemplo sirva de ayuda a otras parejas. Que vean que casarse es posible. Porque escuchar a alguien positivo es necesario a veces”, concluyen. ¡Toda la felicidad del mundo a los dos!