6 consejos para organizar un banquete tipo bufet

Además de resultar, por lo general, más baratos que un banquete clásico, los bufets pueden ser igual de originales, sofisticados y elegantes si se elige bien el catering. Y no acaban aquí sus ventajas, ya que facilitan que los invitados se puedan relacionar fácilmente unos con otros, al tiempo que podrán admirar bien tanto el increíble vestido de novia como los diferentes comple,entos nupciales, incluido el ramo de novia. ¿Decididos a apostar por un bufet en vuestro gran día? Si es así, recordad indicarlo en vuestras invitaciones de boda. Y para que todo salga perfecto, descubrid algunos aspectos prácticos que conviene tener en cuenta. Os los detallamos todos a continuación.

1. El número de invitados debe ser limitado

El bufet no es adecuado para enlaces muy numerosos, con más de 150 invitados, ya que puede resultar difícil organizar las colas delante de las mesas de comida o alrededor de los camareros. Si vuestra lista de invitados es inferior a ese número, un buen profesional sabrá cómo organizar las mesas y distribuir los distintos platos para que todo el mundo pueda acceder a ellos con facilidad.

2. Debe haber suficiente espacio

Cuando se organiza un bufet hay que tener en cuenta que los invitados no van permanecer todo el rato en el mismo sitio, sino que se van a estar moviendo continuamente. Por eso conviene que el ambiente sea lo bastante amplio para que no haya problemas de espacio. Por otro lado, la distancia entre la comida y las mesas o asientos no debe ser excesiva. También es importante que los invitados puedan acceder al bufet desde varios lados de la mesa, lo que evitará la formación de colas.

3. ¿Qué es esto?

A veces, las bandejas de un bufet presentan guisos suculentos, pero no se distingue exactamente con qué ingredientes están elaborados. ¿Es carne o pescado? ¿Son verduras? Lo ideal es poner un pequeño cartel al lado de cada plato especificando qué contiene. Asimismo, indicad aquellos que son específicos para intolerantes a la lactosa o al gluten, aptos para vegetarianos... Si los hacéis a juego con el resto de la cartelería nupcial del enlace o bien armonizando con las ideas de decoración para bodas que tenéis pensadas para vuestro gran día, el resultado será de 10.

No os olvidéis que la variedad de comida es una de las grandes ventajas de los bufets nupciales, por lo que aseguraros de que hay recetas para todos los gustos, desde frías hasta calientes, pasando por platos típicos del lugar, recetas de toda la vida y modernas creaciones. Y lo mismo pasa con la bebida: cervezas, vino, refrescos, licores... ¡Que nadie se quede con hambre ni con sed!

4. Que no falten asientos

Aunque planeéis disponer mesas altas de cóctel y creáis que vuestros invitados van a preferir estar de pie, pensad que un banquete de boda dura muchas horas. Entre plato y plato, al son de las canciones románticas para bodas que hayáis elegido para vuestro gran día, lanzaréis el ramo de novia con calas, se pronunciarán discursos y se hará entrega de los distintos regalos para invitados de boda. Así que es importante habilitar diferentes zonas en las que familiares y amigos puedan sentarse tranquilamente a comer y conversar. Combinar diferentes tipos de mesas con sillas, taburetes e, incluso, una zona chill out, creará un ambiente muy cómodo para todo el mundo.

5. Tendencias de moda

Hoy en día existen un sinfín de ideas divertidas para bodas en las que os podéis inspirar a la hora de organizar un bufet original. Entre ellas, las foodtrucks. ¿Qué son? Son caravanas especializadas en un tipo concreto de comida, como hamburguesas, helados o crepes, aunque también pueden ofrecer un servicio de picoteo o recena para los momentos del aperitivo o de la barra libre de vuestra celebración. ¿Y que os parece incluir un foodtruck de zumos y batidos puede darle un toque especial a la fiesta final?

También se puede contratar a un cocinero que prepare los platos en directo. Es lo que se conoce como showcooking. Se encargará de que los platos siempre estén en su punto, y puede preparar arroces, fideuás, barbacoas o sushi, por ejemplo.

6. Que no falten camareros

Aunque los invitados se sirvan ellos mismos, siempre debe haber unos profesionales cuidando que la comida esté en su punto de temperatura, retirando platos y bandejas vacías y reponiendo las bebidas que se acaben. De este modo, todo fluirá y vuestros familiares y amigos se sentirán cómodos y relajados en todo momento.

Si os decidís por un bufet, no dejes de llevar unos zapatos de novia cómodos, ya que seguramente pasarás muchas horas de pie. Pero valdrá la pena, porque la variedad de alimentos que permiten este tipo de banquetes no tiene comparación con la de los tradicionales. Y los invitados estarán encantados de poder moverse de un lado a otro para lucir cómodamente sus vestidos de fiesta. ¡A disfrutar!