5 claves para una pedida de mano 10
El momento de pedir matrimonio a tu pareja marca un antes y un después en vuestra relación. No te pierdas estas claves para que sea perfecto.
Si has pensado que ya es hora de formalizar vuestra relación, de dar un paso más y pedirle que se case contigo para empezar una nueva vida juntos como marido y mujer, te damos las claves para que a ese momento tan especial no le falte lo más importante:
1. La fecha
Las fechas especiales como Navidad, San Valentín, su cumpleaños... son perfectas para la sorpresa. Eso sí, para ir sobre seguro será mejor que ya hayáis hablado de matrimonio en alguna ocasión y estuvierais de acuerdo, claro.
2. El sitio
El lugar en el que le hagas la pregunta mágica también es importante. Elige un sitio que tenga significado en vuestra relación. Una cafetería, un restaurante, el lugar donde os besasteis por primera vez... El simbolismo del lugar le añadirá significado y romanticismo a la petición. Eso sí, siempre es mejor que sea algo privado entre los dos que una declaración delante de cientos de personas, aunque para gustos, los colores.
3. La forma
La forma en la que se lo pidas no tiene que ser forzada ni sacar a la luz a un tú que ni siquiera existe. Nada de escribir un poema cuando odias la poesía o de arrodillarte si lo que quieres es mirarla directamente a los ojos. Sé tú mismo y hazlo a tu manera, a vuestra manera, no hace falta mucho para que sea un instante único y especial.
4. El look
El aspecto físico es importante pero tampoco hay que llevarlo al extremo puesto que no querrás que sospeche nada más verte. Vístete acorde con el lugar de vuestra cita y pídele que se arregle especialmente si vais a un sitio elegante. Pero no te disfraces, siéntete cómodo/ cómoda y ponte algo con lo que sepas que le vas a gustar.
5. El regalo
Para que sea el ideal, no dudes en consultar a su mejor amiga o amigo pero también déjate llevar por tu intuición y lo mucho y bien que conoces a tu pareja. Eso tambien hace al anillo de pedida o el reloj elegido aún más especiales. La intención es que cuando él o ella lo vea, no se lo quiera quitar nunca más. Para la talla en el caso del anillo, intenta coger uno suyo o pedirlo a alguien. Si no puedes no te preocupes, elige una medida estándar y luego se lo arreglarán.