Bodas rústicas: déjate inspirar por un estilo natural y sencillo
¿Enamorados del estilo rústico? Escenarios naturales, colores cálidos, detalles en madera y flores de gran belleza; este estilo es una llamada a la sencillez y la naturalidad más romántica, a unas bodas únicas, llenas de magia y personalidad.
El estilo y las distintas ideas de decoración para bodas rústicas son inconfundibles. La magia de sus escenarios naturales, su decoración cálida y tradicional, y la perfección de unos looks nupciales únicos –donde los vestidos de novia se convierten en una pieza cómoda, los ramos de novia dejan de ser bouquets perfectos y donde los trajes de novio comienzan a caracterizarse por una originalidad sin igual– han convertido este estilo en el más soñado por los novios actuales.
La madera, el latón, telas como la arpillera y las flores silvestres, conforman la decoración de estas ceremonias tan características, celebradas ante un paraje absolutamente natural, como un bosque o un campo. Los tonos cálidos, como el ocre o el rojo, el verde más salvaje, el azul cielo, el blanco y los nude, ofrecen un toque de color característico y completamente único en las bodas de este estilo, conformando un sinfín de perfectos acabados, en sintonía plena con la belleza del telón natural. El look de los novios suele transmitir una gran sencillez y personalidad, que convierte sus trajes nupciales en únicos. Los colores crudos y nude, pequeños toques de color en tonalidades vivas, el encaje y las telas vaporosas y holgadas, y un estilo desenfadado en el acabo del vestido, así como en el peinado o el ramo de la novia, son básicos para un look nupcial completamente rústico.
1. Color y personalidad en plena naturaleza
María y Josema celebraron su preciosa boda rústica en el mágico pueblo de Rascafría, Madrid. El enclave, Finca Prados Riveros - Casa El Palero, resultó ser el escenario idóneo para una perfecta boda de este estilo campestre; un telón de fondo único, compuesto por los colores más naturales, verdes, marrones, anaranjados y rojizos, formaron parte de la decoración, fundiéndose así con las sentidas emociones del momento.
María, directora de arte, calcó su personalidad en lo que fue un look de novia absolutamente único y especial. Los colores del escenario de la ceremonia fueron protagonistas indiscutibles de su vestido de novia, alejado por completo del tradicional blanco nupcial. Una corona de flores adornando su recogido, cerraba un look maravilloso sin igual. Josema, algo más tradicional, lucía un traje de colores más cálidos: camisa azul cielo, a conjunto con una corbata azul real, seguido de una chaqueta de traje clásica en tonalidades caqui y detalles en rojo y un pantalón beige. Sin duda, ambos novios iban radiantes.
Una decoración completamente rústica adornó toda la ceremonia y el banquete. La madera, el latón y el mimbre formando parte de cada detalle, asientos, altar y banquete. Varios fardos como asientos nupciales, pusieron el broche de oro a una decoración en sintonía plena con el escenario de celebración.
Fotografías cedidas por: Leafhopper Weddings
2. Magia, romanticismo y sencillez en un paraje natural
Cumpliendo el mayor de su sueños; Alba y Oliver deseaban fundir su "sí, quiero" en algo absolutamente diferente a todo lo demás, y así fue. Su boda estuvo a la altura, sin duda, y literalmente, pues la celebración tuvo lugar en los Picos de Europa, a 1800 metros de altura. Mágica desde el primer momento, la boda de ambos jóvenes empezó de la forma más personal y diferente; cogiendo un teleférico y haciendo a pie algo más de 4 km hasta llegar al lugar de celebración. Un esfuerzo que, sin duda, valió la pena.
Tan sencilla como rústica, esta boda del estilo se caracterizó por una decoración discreta pero muy romántica. El refugio de celebración, construido de madera barnizada y piedras naturales, escondía un precioso y acogedor restaurante. Y aunque el lugar ya convirtió en única esta rústica boda, el look de los novios no podía ser menos; sencillos pero muy elegantes, destacó por encima de ambos ella, por supuesto, con un vestido holgado de medias mangas abiertas y un precioso escote que dejaba entrever la belleza de su espalda.
Fotografías cedidas por: Xabi Vide
3. Una mágica boda otoñal y rústica
Julia y Carlos se dieron el "sí, quiero" en un precioso paraje de Vilajüiga, Girona. Ambos enamorados, celebraron una boda de estilo rústico única y otoñal; colores cálidos como el rojo, así como los frutos típicos de la época, fueron los protagonistas indiscutibles de los mágicos rincones de su boda. La madera y una tela suave, debatiéndose entre el encaje y el crochet, clásicos de una boda rústica, conformaron los espacios más importantes de la boda, como el altar o las mesas del banquete.
Ambos con un estilo único, sus looks despuntaron por tener un perfecto equilibro entre sencillez, romanticismo y elegancia. El look de él se compuso de una clásica camisa blanca, acompañada de una chaqueta de traje en tonalidades grisáceas y pajarita de color rojo. Así como este último complemento, sus pantalones en un naranja apagado dieron el toque de color al look. Ella, vistió espectacular con un vestido vaporoso y con encajes a modo de detalles. Lucía perfecta con una preciosa corona de flores y el pelo al viento, y un ramo a conjunto con las flores otoñales del complemento.
Fotografías cedidas por: Nicole Gulau
4. Una boda rústica, colorida y cultural
María y Dani contrajeron matrimonio en una preciosa masía rústica en Alginet, Valencia. Huerto de Bonet es el escenario que presenció el amor incondicional entre estos dos jóvenes, y el mejor telón de fondo para una boda rodeada de naturaleza y en plena concordancia con los detalles de una auténtica boda campestre.
La esencia del estilo rústico conformó cada detalle de la decoración de esta preciosa ceremonia; mágico altar compuesto por maderas y tul, mesas de banquete de madera y completamente desnudas, y fantásticos rincones repletos de detalles cuidados hasta lo más mínimo; tarritos de cristal con velas, encajes, pizarras, cestitos de mimbre, cajas de madera y botellitas de vidrio verde. Una variedad de flores y flores silvestres, condecoraban unas mesas de banquete únicas. Las tradiciones más populares de su país fueron un ápice añadido de originalidad. Dani, austriaco, quiso homenajear en su gran día su país natal; trajes tradicionales y un bufé con comida típica, pusieron el broche de oro a esta boda rústica tan especial.
Ambos vistieron de una forma sencilla, pero personal y única; él, con un traje de pantalón corto, tirantes y pajarita. Ella, con un vestido vaporoso, sencillo y con detalles de encaje. El detalle de color lo pusieron sus complementos, una preciosa corona de flores amarillas, naranjas y verdes, en sintonía absoluta con los colores del escenario, y a juego con las flores que conformaban su precioso ramo de novia.
Fotografías cedidas por: Joaquín Corbalán Fotógrafo
5. En plena sintonía con el escenario
Valle y Juan contrajeron matrimonio en un precioso cortijo de Córdoba, Cortijo Santa Rosa. En una boda llena de originalidad y romanticismo, esta pareja de enamorados apostó por un estilo rústico impecable; el lugar de celebración traía una esencia plenamente campestre, por lo que la boda en sí consiguió fácilmente este precioso aire rústico. Muchísima madera como decoración, en forma de cajas, palés o cartelería, y el color ocre predominando cada mágico rincón, dieron como resultado una boda sumergida por completo en el estilo.
Naturales, sencillos y felices, Valle y Juan vistieron con looks llenos de personalidad; ella, brilló como una auténtica novia campestre, con un vestido de corte evasé y escote acabado en V, de telas vaporosas y precioso encaje. El toque de color lo dieron, en su look, una preciosa corona de dalias, a juego con su ramo, y unas sandalias de tacón con ese mismo toque rosáceo. Él, en sintonía plena con el escenario natural, vistió con un traje en tonalidades azul grisáceas, pajarita y mocasines. Ambos se dieron el "sí, quiero" en una boda rústica de cuento.
Fotografías cedidas por: El Rayo Verde
6. Felicidad y amor en estado puro en una preciosa boda rústica
En Llers, Girona, en la masía Mas Oliveres, María y Carlos unieron sus corazones para siempre. Cuidados, delicadeza y trabajo; tres objetivos que definirían a la perfección la detallada boda de esta pareja, ambientada plenamente en un estilo rústico y muy delicado. Detalles en color, madera y DIY, fueron protagonistas indiscutibles en cada rincón de su romántica boda.
Ambos vistieron impecables para la ocasión. Él, algo más clásico, despuntó con un clásico traje en negros y blancos, y detalles en un rojo pasión, absolutamente único. Ella lució preciosa y natural, con un vestido desenfadado, vaporoso y con detalles de encaje. Su corona de hojas y flores silvestres, a juego con un ramo de estilo desenfadado, pusieron el broche de oro a un look absolutamente romántico y campestre.
Fotografías cedidas por: Fotostudi
7. Una boda rústica llena de estilo, elegancia y personalidad
Barbara y Michelle celebraron su particular boda rústica en la preciosa masía L'Avellana Mas d'en Cabre en Ruidecols, Tarragona. Su celebración fue el reflejo de una brillante personalidad y un gusto exquisito. La decoración de su boda, de un estilo rústico impecable, se caracterizó por un gran colorido; gran variedad de flores en tonalidades vivas, detalles en latón y madera barnizada de azules, amarillos y rosas, enredaderas, y una puesta en escena absolutamente mágica. De cuento, el altar se compuso por un precioso columpio colgante de madera y una pequeña mesita de madera cubierta con encajes. Los asientos, únicos también, estaban compuestos por un conjunto de sillas individuales, de metal o madera pintada en diferentes tonalidades, y de formas completamente distintas.
El look de ambos destacó por su belleza, elegancia y colorido. Él, vestía con un clásico traje en tonalidades azules. Destacó su prendido, en color granate, a juego con el look de la novia. Ella, vistió un vestido con transparencias y encaje único, que culminó con un imponente chaquetón de pelo. El toque más chic del look se lo dio un precioso sombrero en tonalidades granate y detalles dorados, en conjunto con las flores de su ramo.
Fotografías cedidas por: Leafhopper Weddings
8. Una boda de ensueño en l'Empordà
En la preciosa masía Mas Oliveres en Llers, Girona, Anna y Curu se dieron el "sí, quiero" en lo fue, sin duda, una boda mágica rodeada de naturaleza. El estilo rústico estaba presente en cada rincón de la ceremonia, pues ya el propio escenario trajo consigo la esencia de lo campestre; sus verdes, sus campos en ocre y los detalles en piedra y madera de la masía, eran de un estilo rústico inconfundible. Además, la decoración de la ceremonia ayudó a poner el broche de oro a una boda perfectamente ambientada en el estilo; palés y cajas de madera cubriendo los rincones de la ceremonia, troncos conformando el altar, bases naturales de madera como porta alianzas y un sinfín de detalles en latón y mimbre. Las flores, en concreto las silvestres, fueron las grandes protagonistas.
En cuanto al look, ambos novios lucieron radiantes. Él vistió con un traje clásico de chaqueta con pajarita y en tonos azules. Ella, preciosa, vistió con un vestido corte imperio, con una falda holgada y telas vaporosas. Su ramo, de estilo desenfadado y en tonos lilas, conjuntaba a la perfección con el prendido del novio.
Fotografías cedidas por: Wedding's Art
9. Dos esencias únicas: novios románticos y un precioso escenario natural
La Tejera de Fausto, en Segovia, fue el escenario que presenció la mágica boda de Silvia y Rory. Su ceremonia, de un perfecto estilo rústico, brilló única por su delicada decoración, conformada por maderas, tarritos de cristal, banderines de tela arpillera, pizarras y una gran variedad de flores, de las que destacaban las silvestres por su colorido incomparable.
Ella, preciosa, vistió clásica con un vestido de corte en A, con una falda de tela vaporosa y un cinturón con incrustaciones, que realzaba por completo la belleza de su figura. El toque de color en su look lo dio su ramo, compuesto por margaritas y flores amarillas. A juego iba la corbata de un novio impecable, en tonos amarillos, seguido de un clásico traje negro.
Fotografías cedidas por: Beatriz Tudanca
Las bodas rústicas poseen un estilo único e incomparable. Sus colores naturales, la belleza de los escenarios más campestres y la personalidad de los novios, son las grandes características que, indiscutiblemente, posicionan este estilo rústico en uno de los más mágicos.